Guindos pasa de los "brotes verdes" a "la luz al final del túnel"

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ya no habla de "brotes verdes": prefiere usar otro término manido para expresar la confianza —aunque puede que sea más una cuestión de fe—, el de la la luz al final del túnel. Guindos considera que existen precisamente "algunos signos de luz al final del túnel" que permiten albergar cierto optimismo respecto a la situación de la economía española.

En una entrevista concedida al diario alemán Die Welt, Guindos asegura que las reformas acometidas por el Gobierno, "aunque dolorosas en el corto plazo, darán fruto", y señala que la economía española podría registrar en el cuarto trimestre de 2013 "un ligero crecimiento respecto al trimestre anterior".

En este sentido, el titular de la cartera de Economía y Competitividad defiende que el Gobierno trata de "poner orden" en la economía española, reduciendo el endeudamiento del Estado con un "considerable" recorte del déficit público en un contexto de contracción económica, lo que ha representando "un esfuerzo enorme".

"La consolidación fiscal crea confianza especialmente. Cuando los mercados perciben que las finanzas públicas son sostenibles, esto crea confianza", dice Guindos, quien destaca que "para el Gobierno español ya es más fácil captar financiación en los mercados internacionales y las empresas españolas cada vez obtienen crédito en términos más favorables".

Guindos asegura que "contratar es más sencillo, barato y atractivo para las empresas" con la reforma laboral

En este sentido, el ministro español recuerda que el país se encuentra "en medio de una limpieza del sector financiero" tras recapitalizar la banca española con 37.000 millones procedentes del fondo de rescate permanente (MEDE) y la creación de "un banco malo" para deshacerse de los activos tóxicos.

"Hoy en día, la industria financiera es más fuerte y sana que antes y comienza de nuevo a poder suministrar crédito al sector privado", señala Guindos, quien destaca las medidas adoptadas para liberalizar algunos sectores, como el alquiler, y, especialmente, la reforma del mercado laboral, que permite contrataciones más baratas a las empresas.

"Sobre todo, hemos reformado profundamente el mercado laboral para hacerlo más flexible y se ha revisado completamente el sistema de negociación colectiva, por lo que contratar es más sencillo, barato y atractivo para las empresas".

Asimismo, el ministro señala que, si bien anteriormente España podía mantener su competitividad mediante devaluaciones de la moneda, actualmente eso no es posible, por lo que el país debe ofrecer unos costes laborales más favorables —más baratos— que los de sus socios de la UE, aunque esto sea doloroso al conllevar recortes de empleo y ajustes salariales.

A este respecto, Guindos considera "un éxito" que algunos de los princiales fabricantes de automóviles, como Ford y Renault, hayan decidido apostar por España al encontrar en el país fábricas "más competitivas" que en otras partes de Europa.

"Ford y Renault han decidido aumentar su capacidad en España porque las fabricas españolas son más competitivas que en otras partes de Europa. Pienso que es un éxito", señala el ministro, quien subraya que las compañías "que no dependen de la financiación de los bancos españoles, vuelven a apostar por el país".