Al PSOE le conviene desdramatizar la posibilidad de una prórroga de los presupuestos para negociar desde una posición de mayor fortaleza. Ese es el mensaje que lanzó ayer desde Jaén un auténtico zorro de la política como Alfonso Guerra, actual presidente de la Comisión Constitucional del Congreso. 'No sería escandaloso ni se hunde la democracia' por prorrogar los presupuestos, dijo Guerra, que recordó que ya ha pasado varias veces en la historia de la democracia.

El veterano dirigente socialista admirió que 'aunque las negociaciones no han empezado' ahora mismo no hay una mayoría clara para aprobar las cuentas del Estado ni se vislumbra ninguna a corto plazo.

De esta manera, Guerra salía al paso de los mensajes de presión de los partidos catalanes (muy matizado en el caso del PSC), en el sentido de condicionar su voto a los presupuestos a la financiación autonómica. Ayer mismo el portavoz adjunto de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, insistía en una entrevista a COMRàdio que 'si no trabamos los presupuestos no lograremos una buena financiación'.

Mensaje a Montilla

El exvicepresidente del Gobierno también tuvo palabras envenenadas para el president catalán, José Montilla. Guerra dijo que estaba 'entre dos fuegos' al provenir 'de un grupo que llamaban de los capitanes, enfrentado a las posiciones de un sector del PSC que era más nacionalista'.

Alfonso Guerra se hacía eco así de las esperanzas que habían puesto en Montilla algunos dirigentes del PSOE que pensaban que Pasqual Maragall era demasiado catalanista y que ahora le acusan de haber asumido las posiciones de su antecesor e incluso de Jordi Pujol.