Representantes del Gobierno venezolano y dirigentes de la oposición han multiplicado hoy los llamamientos a votar en el referendo que se celebra en Venezuela, en un clima de normalidad y con una afluencia calificada de "regular a buena".

El canciller venezolano, Nicolás Maduro, dijo a la prensa que la participación era "regular a buena". al referirse a la consulta popular a la que han sido convocados hoy unos 16 millones de venezolanos para pronunciarse sobre la reforma constitucional que promueve el presidente Hugo Chávez.

"El pueblo está dando hoy una gran lección en democracia", pero hacia el mediodía aún hay quienes no sufragan "y deben hacerlo, deben cumplir para seguir avanzando en la construcción de un país libre, soberano y verdaderamente democrático", agregó el ministro, tras emitir su voto en Caracas.

"Primero a votar y luego a defender, con serenidad, legalidad y con respeto a la Constitución los resultados que anuncie el Consejo Nacional Electoral (CNE)", exhortó el jefe de la diplomacia.

El voto de los venezolanos debe ser "de lealtad al pueblo, a la patria, a nuestras raíces", ya que "todos los caminos que nos traen a esta decisión histórica" de decidir sobre una Constitución socialista, insistió.

A falta de cifras oficiales de participación, unas seis horas después de la apertura de los centros de votación a las 06.00 hora local (10.00 GMT), se podía observar que la afluencia al mediodía no era masiva en los centros de votación en Caracas.

La mayoría de los miembros del Gobierno y de los dirigentes de la oposición sufragó en la mañana en sus respectivos centros, pero el presidente Chávez, promotor de la reforma, no había acudido aún, al mediodía, a su lugar de votación.

Venezuela da hoy "una lección de democracia al mundo entero" al votar "en paz y tranquilidad" en el referendo, dijo a la prensa la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena.

La funcionaria electoral se declaró convencida de que con esta misma paz concluirá la jornada, tras el cierre de los centros que oficialmente es a las 16.00 hora local (20.00 GMT), aunque se puede prorrogar si quedan electores en cola.

La presidenta del CNE señaló que se han producido "4 o 5" incidentes aislados en algunos centros de votación del país y que las personas que los han protagonizado, al parecer por intentar llevarse los comprobantes de votación, han sido detenidas por delito electoral.

"La inmensa mayoría" está votando en un ambiente de total normalidad, apuntó Lucena, quien recordó que, por ley, están hoy prohibidas las manifestaciones y reuniones, y se mostró segura de que la población cumplirá con las normas.

Por su parte, en declaraciones a la prensa, el líder opositor Manuel Rosales exhortó hoy a los ciudadanos a que vayan a votar y se inicie en Venezuela "un camino para la paz" y el diálogo.

"Decidamos lo mejor para Venezuela", señaló Rosales, al alentar a la participación en el referendo sobre los cambios a la Carta Magna de 1999.

"Se trata de una manifestación de amor por Venezuela, por nuestro futuro, por nuestros hijos", manifestó el ex candidato presidencial y gobernador del estado Zulia, en el occidente del país, donde votó.

Es un "día de alegría, de fiesta, de participación", agregó Rosales, que se presentó como candidato de la oposición en las presidenciales del 3 de diciembre de 2006 y fue vencido por Chávez.

Asimismo, el alcalde opositor del municipio caraqueño de Chacao, Leopoldo López, que votó en Caracas, alentó, en posteriores declaraciones a la cadena privada de televisión Venevisión, a "salir a votar con entusiasmo".

López, que rechaza la reforma que promueve Chávez, recordó que la oposición tiene testigos en los centros de votación del área metropolitana y en todo el país.

El cardenal venezolano, Jorge Urosa, dijo que en las misas de hoy "no hay un llamado específico" de la Iglesia a que los feligreses voten "no" a la reforma constitucional que los arzobispos han calificado de "moralmente inaceptable".

"En las misas no hay un llamado específico; se llama a votar y a promover grandes valores", apuntó Urosa a la prensa, tras emitir su voto, y advirtió que no deseaba aludir hoy a "los conflictos" de la cúpula eclesiástica con el Gobierno de Chávez.

La propuesta de reforma constitucional que impulsa el gobernante ha sido tildada oficialmente por la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) de "moralmente inaceptable", calificativo que el presidente les ha devuelto a cada uno de sus integrantes.

Chávez sostiene que esta reforma está destinada a "dar más poder al pueblo" y acelerar el "rumbo hacia el socialismo del siglo XXI", mientras sus opositores consideran que busca crear un "régimen socialista autoritario y personalista", en el que el mandatario acaparará todos los controles.