El piloto brasileño de "Ferrari", Felipe Massa, hospitalizado en Budapest tras resultar herido el pasado sábado en el circuito "Hungaroring" de ese país, se considera afortunado de estar vivo y declara: "Volveré a competir".

Massa sufrió el accidente durante la segunda ronda de clasificación para el Gran Premio de Hungría debido a un fuerte impacto en la cabeza de un muelle desprendido del Brawn de su compatriota Rubens Barrichello.

En unas declaraciones al periódico "News of the world", Massa, que el jueves abandonó la unidad de cuidados intensivos del hospital húngaro y ha dado los primeros pasos, planea volver mañana mismo a Sao Paulo.

"Sé que tengo suerte de estar vivo. No recuerdo nada del accidente, pero volveré a competir", declara al rotativo.

Massa explica que, cuando despertó del coma inducido por los médicos tras la operación, no sabía dónde estaba, y empezó a tirar de todos los tubos.

Su hermano Eduardo intentó detenerle, por lo que tuvieron una pelea, recuerda.

"El accidente fue tan desafortunado, pero sé que soy afortunado de estar vivo. No recuerdo nada de lo ocurrido", manifiesta.

"Era mi carrera, por lo que cuando me desperté del coma no podía creérmelo, cuando me dijeron que Lewis (Hamilton) había ganado y Kimi (Raikkkonen) había quedado segundo", asegura el piloto convaleciente.

Mientras Massa se recupera, el alemán Michael Schumacher, de 40 años y siete veces campeón del mundo, le sustituirá, y regresará a los circuitos de Fórmula 1 el próximo 23 de agosto en Valencia.

Schumacher visitó a su compañero en el hospital, tras lo que confesó "sentirse mejor".

Schumacher explicó que tenía agujetas después de haber hecho las primeras pruebas y añadió: "Tengo curiosidad por ver qué pasa en los próximos días".