La ex locutora del Metro de Londres, despedida el pasado mes por parodiar sus propios mensajes de advertencia en el suburbano, ha conseguido un nuevo trabajo como voz de un GPS (sistema de navegación por satélite).

"He encontrado mi próxima estación en la vida como voz del sistema de navegación CoPilot Live", afirma Emma Clarke, de 36 años, en su página de Internet.

"He puesto voz a los trenes del Metro y ahora se la pongo a los coches. ¿Qué vendrá después? ¿Cohetes espaciales? ¿Lanchas?", se pregunta con tono jocoso la locutora.

"Un día -añade Clarke en la misma línea chistosa-, el mundo de los anuncios de transporte será mío, todo mío".

El nuevo jefe de la anunciadora, Michael Kornhauser, director de la empresa que fabrica el citado GPS, se ha congratulado por el fichaje: "Emma -señaló- tiene una gran voz y un sentido del humor fantástico".

Clarke solía advertir a los usuarios del Metro londinense de que tuvieran cuidado para no introducir el pie entre coche y andén, el famoso y pausado "Mind the gap" que tanto gusta a imitar a los turistas.

Sin embargo, la locutora, que había trabajado para el metropolitano de la capital británica desde 1999, perdió su empleo tras confesar en una entrevista que nunca utilizaba ese "espantoso" medio de transporte.

Además, Clarke gastó una broma en su página de Internet al usar el mismo tono serio de sus advertencias en el suburbano para burlarse de lo alto que hablan los turistas estadounidenses o pedirle a un usuario que dejara de mirar "las tetas" a una viajera.