Este artículo se publicó hace 17 años.
Euskaltel denuncia a Telefónica por "abuso de posición dominante"
La compañía Euskaltel ha presentado una denuncia contra Telefónica ante el Servicio Vasco de Defensa de la Competencia por la comisión de "prácticas de abuso de posición de dominio".
En un comunicado, el operador vasco aseguró hoy que dichas prácticas, "contrarias al artículo 2 de la Ley de Defensa de la Competencia", suponen un "claro perjuicio para la compañía vasca al imponer Telefónica a sus propios clientes precios discriminatorios aplicando tarifas superiores en las llamadas realizadas a móviles de Euskaltel".
En la denuncia se concreta que la "imposición" de estas tarifas ha supuesto para Telefónica unos "ingresos extra superiores a 2,6 millones de euros cobrados a sus propios clientes por el precio impuesto para las llamadas realizadas a móviles de Euskaltel".
El operador vasco aseguró que Telefónica "viene estableciendo para sus clientes desde enero de 2007 unas tarifas fijo-móvil y móvil-móvil sustancialmente superiores en las llamadas con destino a la red móvil de Euskaltel que las que aplica al resto de operadores (la propia Telefónica Móviles, Vodafone, Orange, y resto de operadores móviles virtuales)".
Agregó que Telefónica aplica estas tarifas "también a las llamadas terminadas en Yoigo, para equilibrar el sobreprecio en la terminación de llamadas que aplica este operador, ya validadas por la CMT".
Euskaltel explicó que en su caso es distinto, ya que "Telefónica aplica el sobreprecio a sus clientes en las llamadas que realizan a terminales del operador vasco sin ninguna justificación que ampare dicha imposición de tarifas".
Por ello, "se percibe una situación claramente discriminatoria que tiene efectos anticompetitivos para Euskaltel ya que, como consecuencia de estas prácticas, Telefónica está incurriendo en un claro abuso de su posición de dominio en los mercados de acceso a redes de telefonía móvil", afirmó la compañía vasca.
Euskaltel concretó que, "como puede comprobarse en su página web, Telefónica factura 0,223 euros por la duración de la comunicación en horario normal a las llamadas a la red de Euskaltel, mientras que el coste queda entre 0,159 y 0,172 euros para las de Movistar o Vodafone, o 0,170 euros en horario reducido a las llamadas a Euskaltel, mientras al resto les cobra entre 0,099 y 0,109 euros por segundo".
La empresa que preside José Antonio Ardanza puso de relieve que "esta conducta abusiva se centra en el País Vasco de forma fundamental".
"Únicamente el 17% de las llamadas a terminales móviles de Euskaltel procedentes de terminales fijos tiene su origen en comunidades autónomas diferentes al País Vasco y, por tanto, los efectos de un incremento de las tarifas a los usuarios afectan principalmente a los residentes en la Comunidad Autónoma de Euskadi", según Euskaltel.
La compañía concretó que los 2,6 millones de euros que estima ha obtenido Telefónica con estas prácticas es una cantidad calculada "a partir de la diferencia entre lo cobrado por Telefónica a sus abonados en sus llamadas a la red móvil de Euskaltel y lo que hubiera cobrado por esas mismas llamadas realizadas a la red móvil de Vodafone".
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