El Euribor cierra octubre al 4,647% y se anota su primera bajada en dos años

El Euribor a un año, el indicador más usado para calcular las hipotecas en España, se anotó en octubre su primer recorte en dos años, al cerrar en el 4,647 por ciento, una bajada que según los analistas podría continuar en los próximos meses y ante la que las asociaciones de usuarios piden prudencia.

Sin embargo, este descenso, que sitúa al Euribor por debajo de los cierres de septiembre y agosto y pone fin a la peor racha de subidas desde su creación en enero de 1999, no conllevará una rebaja de la hipotecas, ni en el caso de las que se revisan anualmente ni en el de las que se calculan con periodicidad semestral.

Esto se debe a que en octubre del año pasado el Euribor estaba al 3,799 por ciento y hace seis meses quedó fijado en el 4,235 por ciento.

Así, para una hipoteca media de 150.000 euros amortizable en 25 años y con un diferencial del 0,50 por ciento, las cuotas que se revisen anualmente subirán 73 euros al mes, lo que al año supone un aumento de 876 euros, el equivalente a una cuota de más; en tanto que las que lo hagan semestralmente se incrementarán en 36 euros.

En agosto, el indicador cerró al 4,661 por ciento, en tanto que en septiembre se elevó al 4,725 por ciento tras sumar su vigésimo cuarta subida consecutiva.

La razón de las subidas del Euribor radicaba en la política monetaria mantenida por el Banco Central Europeo (BCE) desde diciembre de 2005 para intentar controlar la inflación y la masa monetaria de la zona euro.

En virtud de esa política, el tipo de interés oficial en la Eurozona pasó del 2 al 4 por ciento, tras ocho subidas consecutivas de un cuarto de punto.

Este estrategia se vio frenada tras la crisis hipotecaria y crediticia registrada en agosto y que en septiembre obligó al BCE a mantener los tipos y no incrementarlos en un cuarto de punto como tenía previsto.

Los analistas consultados por Efe consideran que el Euribor se mantendrá a la baja en los próximos meses, aunque no registrará descensos agresivos, en tanto que BBVA y Banco Pastor opinan que en 2008 cerrará al 3,9 por ciento.

Esto se debe a que, en su opinión, el BCE no volverá a incrementar el tipo de interés básico para no alejarse de la política de rebajas de la Reserva Federal estadounidense y evitar así que el euro se dispare respecto al dólar.

Por su parte, las asociaciones de consumidores pidieron prudencia a los usuarios, ya que puede que la rebaja de octubre, aunque representa una esperanza, puede ser sólo una "excepción" en una racha de dos años al alza y es pronto para afirmar que ha llegado un cambio de tendencia.

El portavoz de la Confederación Española de Consumidores y Usuarios (CECU), Antonio López, dijo que la bajada no representa ninguna solución para los hipotecados, porque los tipos "siguen estando muy altos" y pidió a los consumidores que no se lancen ahora a la compra de vivienda y opten mejor por el alquiler.

La portavoz de OCU, Iliana Izverniceanu, opinó que la caída del Euribor no es tranquilizadora, ya que no se verá reflejada en las cuotas hipotecarias y se produce en una coyuntura de subida de la inflación, los carburantes y algunos alimentos básicos.

Desde Ausbanc, el adjunto a la presidencia, Angel Garay, opinó que el repunte de la inflación de octubre hace difícil pensar en que el BCE rebajará los tipos de interés y pidió a los consumidores que sean responsables a la hora de endeudarse porque los precios de la vivienda están muy altos y comprar ahora puede suponer unos costes a futuro "difícilmente sostenibles".

En declaraciones a Efe, el vicepresidente de Adicae, Fernando Herrero, apunto que la bajada del Euribor no permite un desahogo al apuro por el que pasan muchas familias y subrayó que las autoridades deben adoptar medidas para paliar los problemas a los que ya se enfrenta miles de españoles para hacer frente a sus hipotecas.