Álvaro Cangas es licenciado en Ciencias Ambientales por la Universidad Europea de Madrid. Entre 2004 y 2006 estuvo haciendo prácticas mientras terminaba la carrera en una consultoría medioambiental en la capital. A la vez, cofundó, con unos compañeros de universidad, una pequeña empresa de Estudios de Impacto Medioambiental que sigue en funcionamiento. Revela que el sueldo entonces era simbólico, "apenas me daba para nada" y recuerda que supuso una ardua tarea compaginarlo todo. En 2006 fue seleccionado para una beca de jóvenes talentos que le permitió pasar cuatro años en Egipto, trabajando de Gerente de Medio Ambiente y Sostenibilidad en CEMEX, una multinacional mejicana líder en la producción de materiales de construcción. Álvaro tiene nociones básicas de árabe y domina el inglés, idioma en el que estudio posteriormente un Máster en Gestión Medio ambiental y Sostenibilidad en la Universidad de Columbia en Nueva York, ahí residió hasta el pasado mes de mayo. Tras el máster, trabajo tres meses en una ONG y decidió volver a su país. Hace ya siete meses que volvió a España, con su prestigioso máster en el bolsillo y aun no ha encontrado trabajo. Confiesa que ha participado en diversos procesos de selección pero que aun no ha tenido suerte. Además, Álvaro no tiene derecho a prestación por desempleo puesto ha desarrollado el comienzo de su carrera en el extranjero. Tiene claro el sector en el que quiere desarrollar sus competencias y no aceptaría dedicarse a otro después de la inversión que ha supuesto su formación. "Trabajé durante mis años de carrera en una fábrica de piel y en un concesionario de coches creando bases de datos, pero ahora quiero algo de lo mío". Reconoce que está abierto a la posibilidad de salir del país, aunque admite que no se iría por gusto; "Donde dije vuelvo, digo me voy. Ya lo hice y volvería a hacerlo" y cuenta que es probable que ocurra muy pronto. El ambientalista de vocación se queja de la "poca flexibilidad laboral" que hay en España: "No hay movimiento. En Estado Unidos, se despide y contrata con mucha más facilidad". Como Álvaro hay muchos jóvenes cualificados en España que se encuentran en situación de desempleo. El madrileño se niega a retomar los estudios y dedica sus días a investigar en sostenibilidad para ampliar su formación; a actualizar su perfil de LinkedIn; a ampliar su nivel de árabe; y sobre todo, a disfrutar de sus familiares y amigos, ya que después de seis años en el extranjero, sin apenas vacaciones, y con previsión de salida cada vez más cerca, explica que pasar tiempo con sus allegados supone en estos momentos una prioridad para él.