Cargando...

La embajada de EEUU en Kabul, acusada de conducta impropia

Publicidad

La embajada de EEUU en Kabul dijo el miércoles que estaba revisando su política de seguridad tras recibir acusaciones de que algunos guardias estaban implicados en altercados estando borrachos y comportamiento lascivo que ponía en peligro a sus diplomáticos en la capital afgana.

Publicidad

En una carta a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, el Proyecto de Vigilancia Gubernamental, que no está adscrito a ningún partido político, dijo que guardias privados de la compañía de seguridad ArmorGroup celebraban fiestas donde se quedaban casi desnudos, bebían vodka y abusaban de afganos.

Click to enlarge
A fallback.

Junto con falta de personal y otras carencias, la organización dijo que la situación minaba la seguridad en el disperso complejo en un momento en que aumenta la violencia en Afganistán.

La embajada de EEUU dijo que se tomaba muy en serio estas acusaciones.

Publicidad

"Hemos adoptado pasos inmediatos para revisar todas nuestras políticas de fuerzas de seguridad locales y procesos y hemos adoptado todas las medidas para asegurar que nuestra seguridad es firme", dijo en un comunicado

americanos y afganos - y respetar los valores culturales y religiosos de todos los afganos".

Publicidad

ArmorGroup emplea a 450 guardias para aportar seguridad a la embajada, en un contrato de cinco años por 189 millones de dólares que fue ampliado en junio.

La compañía es una filial de Wackenhut Services, con sede en Florida. Una portavoz, Susan Pitcher, dijo que la compañía no tenía un comentario inmediato sobre la información.

Publicidad

Los hallazgos son los últimos en una serie de acusaciones de mala conducta por parte de contratistas de seguridad privados contratados por el Gobierno de EEUU para llevar a cabo tareas en Irak y Afganistán.

En esta carta, el grupo dijo que los contratistas fomentaba "un ambiente de 'El señor de las moscas'" se basaba en abusos y rituales humillantes.

Publicidad

La carta citaba a testigos diciendo que habían visto a guardias "orinando a personas" y bebiendo "chupitos de vodka entre las nalgas de otros".

En un caso, un supervisor en ropa interior y blandiendo botellas de alcohol abusó de un afgano cogiéndole la cara y usando tacos para humillarle, agregaron.

Publicidad