El director general de RTVV, Ernesto Moreno, un 'liquidador profesional'
Hombre de confianza de Fabra y sin experiencia en el sector audiovisual, el hasta ahora subdirector de gestión de CulturArts ya 'hizo limpieza' en el Palau de les Arts
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El Gobierno de la Generalitat ha nombrado hoy a Ernesto Moreno como nuevo director general de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) tras la dimisión ayer de Rosa Vidal al frente de la empresa pública por la decisión del Ejecutivo autonómico de cerrarla.
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Este nombramiento se ha realizado en virtud del decreto ley aprobado hoy por el Gobierno valenciano en sesión extraordinaria que le faculta para nombrar a todos los cargos vacantes del consejo de administración de RTVV, incluido el nuevo director general, sin esperar a su elección por Les Corts Valencianes. La radio televisión valenciana cierra después de 24 años de emisiones.
Con un perfil económico y sin experiencia en el sector audiovisual, Ernesto Moreno Murcia era hasta ahora subdirector de gestión del ente público CulturArts, adonde llegó hace poco más de un año. Hombre de confianza del president de la Generalitat, Alberto Fabra, fue el encargado de liquidar el Palau de les Arts Reina Sofía, donde con anterioridad había ejercido de gerente. El ERE que sufrió el Palau se llevó por delante a 40 trabajadores y provocará el cierre de las instalaciones durante cuatro meses al año, así como la reducción del sueldo de los restantes empleados.
El nuevo decreto ley se ha aprobado hoy para cubrir el vacío provocado por la dimisión ayer de Rosa Vidal, y de los otros cuatro miembros del consejo de administración nombrados a propuesta del PP, sin esperar al trámite parlamentario de su nombramiento por Les Corts Valencianes. Los nuevos consejeros de Radiotelevisión Valenciana por el PP son Lluís Bertomeu, Vicente Burgos, José Serralde y Bartolomé Orozco, según ha anunciado en una rueda de prensa el vicepresidente del Gobierno valenciano, José Císcar.
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Respecto a los plazos para hacer efectivo el cierre de RTVV, anunciado el pasado martes, Císcar ha insistido en el carácter "provisional y urgente de estas medidas" y en la necesidad de guardar "prudencia". Lo que inicialmente se pretende con estas decisiones, ha explicado, es que la televisión valenciana "funcione con normalidad, que no se produzcan situaciones en las que no se pueden tomar acuerdos por falta de cuórum en el consejo" de administración y hacer frente a la situación de "ingobernabilidad".
Císcar afirmó esta mañana, en una comparecencia en Les Corts Valencianes, que readmitir a los 1.600 trabajadores de RTVV en cumplimiento de la sentencia que anula el expediente de regulación de empleo costaría 228 millones de euros hasta 2015, "con los que se pueden construir 57 colegios y 60 centros de salud". La decisión del Gobierno valenciano de cambiar la ley de RTVV se ha producido después de que la junta directiva del Partido Popular de la Comunidad Valenciana haya respaldado por unanimidad en una reunión extraordinaria la propuesta de Fabra de proceder al cierre.
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El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, ha acusado al president de dar un "golpe de mano" por cambiar la ley para recuperar el control de la empresa, que quiere cerrar al "no poder aguantar ni 24 horas de televisión democrática y plural". El portavoz de Compromís en Les Corts Valencianes, Enric Morera, ha afirmado que el PP es "el liquidador de las instituciones democráticas valencianas". El portavoz adjunto de Esquerra Unida en Les Corts Ignacio Blanco ha calificado de "golpe a la democracia" el decreto ley aprobado hoy por el Gobierno valenciano.
El comité de empresa de RTVV ha emplazado al president y a los grupos parlamentarios a iniciar una negociación sobre la viabilidad de la empresa y su dimensión basada en la sostenibilidad y la rentabilidad social de la televisión pública. Radiotelevisión Valenciana triplicó ayer su audiencia media durante la programación especial elaborada por los trabajadores de la empresa pública, e incluso el debate nocturno entre portavoces políticos con representación parlamentaria fue seguido por 322.000 espectadores.