Este artículo se publicó hace 14 años.
El derrocado presidente kirguís expresa de nuevo su disposición a negociar
El derrocado presidente de Kirguizistán, Kurmanbek Bakíev, expresó nuevamente hoy su disposición a negociar con el gobierno de confianza popular, encabezado por la líder opositora Rosa Otunbáyeva.
"Estoy dispuesto a llegar a un compromiso, a negociar. Ya es el cuarto día que digo lo mismo, que estoy dispuesto a reunirme con ellos, pero Rosa Otunbáyeva no se ha dirigido a mí", declaró Bakíev a la prensa en Jalal-Abad, en el sur del país, según la agencia rusa Interfax.
Bakíev reiteró estar "dispuesto a estudiar la posibilidad de renunciar al poder si se respetan varias condiciones", entre ellas la de garantizar tanto la seguridad y estabilidad del país como la suya misma y la de su familia.
Al mismo tiempo, aseguró que no tiene intención de viajar a Biskek para entrevistarse con el nuevo gobierno de confianza popular.
"Las nuevas autoridades no pueden ofrecerme garantías de seguridad, por eso no veo que tenga sentido viajar a Biskek", explicó.
Asimismo, señaló que no tiene previsto solicitar asilo político en el extranjero. "No contemplo esa cuestión", dijo Bakíev.
Añadió que quiere abrir el camino legal "para que el parlamento comience ya a trabajar". "Y les digo a ellos (a los diputados): venid aquí (al sur) y trabajad", añadió.
Por otra parte, precisó que sus hijos Marat y Maxim están en el extranjero y que no tiene previsto regresar al país.
"Mis hijos están fuera de Kirguizistán y me temo que ya no volverán", declaró Bakíev, y subrayó que si no regresan es "por cuestiones de seguridad".
Sobre los dos hijos pesa una orden de busca y captura decretada por las nuevas autoridades, contra Marat por abuso de fuerza como jefe de departamento de los servicios secretos, y contra Maxim, quien controlaba toda la economía kirguís, por delitos financieros.
En tanto, el ministerio de Sanidad informó hoy de que "el número de muertos en las acciones de protesta entre el 6 y el 8 de abril ascendió a 84".
Además, según los datos más recientes, todavía siguen hospitalizados 567 heridos.
En los choques la semana pasada entre los cuerpos de seguridad y manifestantes antigubernamentales resultaron heridas más de 1.500 personas.
Tras la huida del derrocado presidente Bakíev de la capital kirguís al sur del país, la oposición asumió el poder y formó un gobierno de confianza popular.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.