La debacle del Bayern ante el Barça sube presión sobre Klinsmann

La paliza futbolística a la que fue sometido el miércoles el campeón alemán, el Bayern de Múnich, por parte del Barcelona, ha hecho crecer la presión sobre su entrenador, Jürgen Klinsmann, incrementando las especulaciones sobre su futuro.

Klinsmann no ha conseguido impresionar en su primera temporada como entrenador del equipo bávaro. El equipo se estrelló en la Copa de Alemania y está cuarto en la Bundesliga, a tres puntos del líder y a falta de ocho partidos por jugar.

Su rendimiento el miércoles frente a un deslumbrante Barcelona echó más sal en las heridas de los aficionados del Bayern, que no están contentos con la estrategia de juego de Klinsmann.

La consistencia del año pasado y su defensa sólida se echan de menos esta temporada, a pesar de la promesa de Klinsmann de "hacer mejorar a cada jugador".

El Bayern fue humillado por 5-1 la semana pasada por el Wolfsburgo, el líder de la Liga, antes de su fiasco ante el Barcelona.

Sin embargo, los directivos del club Karl-Heinz Rummenigge y Uli Hoeness, tuvieron algo que decir sobre los resultados del equipo, pero insistieron en que no tomarían decisiones sobre Klinsmann al calor del momento.

"Uno no debería tomar hoy ninguna decisión", declaró Rummenigge a los periodistas. "Fue una vergüenza pero es mejor si duermes y luego abordas estos asuntos racionalmente".

Preguntado sobre si Klinsmann estaría en el campo otra vez frente al Eintracht de Francfort el sábado, Rummenigge agregó: "No quiero evaluar al entrenador después de cada partido".

Mientras que Rummenigge, director general del club, ha respaldado a Klinsmann durante toda la temporada, el presidente Franz Beckenbauer ha sido menos comprensivo.

"Esto es una catástrofe", dijo Beckenbauer a Premiere Television tras la derrota 4-0 frente al Barcelona. "Fue un juego de colegiales. La primera parte fue la peor que he visto jugar al Bayern".

Con el Bayern ahora casi fuera de la Liga de Campeones, el partido de Liga del sábado contra el Eintracht Frankfurt es crucial si quieren salvar la temporada.

Si no ganan en Fráncfort, esto podría acabar con sus esperanzas al título y posiblemente termine con el breve paso de Klinsmann por el cargo.