Una concentración en Arrigorriaga termina con gritos de "fascistas" a ETA

Unas 200 personas, en su mayor parte vecinos de Arrigorriaga, se concentraron ayer en esta localidad vizcaína para repudiar el asesinato del inspector de policía Eduardo Puelles García, en un acto que ha finalizado entre aplausos y gritos de "fascistas" dirigidos a ETA.

La concentración transcurrió durante unos 15 minutos en el barrio de Abusu, de Arrigorriaga, en las inmediaciones del lugar del atentado, en un silencio solo roto por la intervención de un vecino que se dirigió al público para recordar a Puelles como un "compañero muy conocido en el barrio" y añadir que los vecinos nunca olvidarán "este día tan triste".

El acto estuvo presidido por el alcalde, Alberto Ruiz de Azúa, y contó con la presencia de ediles del PNV, PP, PSE, EB y EA de los ayuntamientos de Arrigorriasga y Bilbao, entre ellos la esposa del lehendakari, Begoña Gil -concejal socialista en la capital vizcaína-, así como del parlamentario vasco de EB Mikel Arana y de la senadora socialista Lentxu Rubial.

Al término de la concentración, que finalizó con aplausos y con gritos de "fascistas" y "ETA fuera", el alcalde agradeció la asistencia al acto y emplazó a los presentes a estar con los familiares del policía y con todas las víctimas del terrorismo.