Este artículo se publicó hace 15 años.
Clinton y Lavrov aseguran que las diferencias sobre Georgia no impedirán un acuerdo nuclear
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, y el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, aseguraron hoy que las diferencias de sus países sobre Georgia no impedirán las negociaciones para un nuevo acuerdo nuclear.
Los dos funcionarios se reunieron hoy en Washington, por primera vez desde que se vieran en Ginebra en marzo pasado y apretaran el "botón de reinicio" de las relaciones entre ambos países, que sufrieron tensiones en los últimos ocho años.
En declaraciones a la prensa tras su reunión, Clinton indicó que ambos abordaron cómo pueden, "mediante esfuerzos conjuntos, establecer un estándar y un ejemplo para mejorar la seguridad de las instalaciones nucleares e impedir la proliferación de material nuclear en el mundo".
Los presidentes de los dos países, Barack Obama y Dmitri Medvédev, acordaron el pasado 1 de abril, en una reunión en Londres al margen de la cumbre del G20, tratar de completar para antes de fin de año un nuevo tratado para la reducción de sus arsenales nucleares que sustituya al START, suscrito en 1991 y que expira el próximo diciembre.
Los negociadores de ambos países, indicó Clinton, ya han comenzado las tareas para ello.
Según indicó Lavrov, "Rusia y Estados Unidos, como las dos potencias nucleares más importantes, pueden ponerse al timón de esta cuestión e implicar a otros".
Pese a que resaltaron los avances en este asunto, los dos jefes de las diplomacias de sus países indicaron que persisten al menos parte de los desacuerdos que motivaron las tensiones entre Washington y Moscú en los últimos tiempos.
Entre ellos figura la situación de Georgia, donde tropas rusas permanecen en territorio de ese país tras la invasión de agosto pasado y donde Tbilisi ha acusado a Moscú de suscitar un levantamiento militar poco antes de unas maniobras militares a las que Rusia se opone.
"Hemos hablado de la situación en el Cáucaso. Es cierto que mantenemos diferencias obvias y no las escondemos, pero estamos de acuerdo en una cosa, que tenemos que hacer lo que podamos para conseguir la estabilidad allí", afirmó Lavrov.
La reducción de los arsenales, destacó el ministro, es "demasiado importante, tanto para Estados Unidos como para Rusia y el resto del mundo" como para permitir que las diferencias sobre un país en particular la bloqueen.
Por su parte, Clinton afirmó que el hecho de que ambos países tengan "desacuerdos en un área" no quiere decir que no vayan a "colaborar en otros asuntos de importancia crucial".
Ambos mandatarios abordaron también, entre otros asuntos, la cooperación para conseguir el fin de los programas nucleares en Irán y Corea del Norte, según indicaron.
El presidente estadounidense, que viajará a Moscú en julio para una cumbre con Medvédev, tiene previsto recibir esta tarde a Lavrov en la Casa Blanca, en un gesto que el mandatario estadounidense normalmente solo reserva a jefes de Estado y de Gobierno.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.