Este artículo se publicó hace 16 años.
La campaña por la Casa Blanca se pone al rojo vivo
La batalla por la Casa Blanca se ha adentrado en su fase más negativa, que se acentúa hoy con el lanzamiento de una página web en la que los republicanos vuelven "al ataque" contra el estatus de "celebridad" del demócrata Barack Obama.
La página interactiva ofrece a los internautas la posibilidad de participar en un juego en el que deben de adivinar a qué famoso -Obama es uno de ellos- se le atribuyen distintas declaraciones.
El primer acertijo: ¿Quién ha dicho: "¿alguien ha ido a Whole Foods (una cadena cara de productos ecológicos) últimamente y preguntado cuánto cobran por la rúcula?".
Las opciones: Cameron Díaz, Barack Obama, Jessica Biel o Matt Damon y la respuesta correcta: Obama, a quien los republicanos muestran con gafas de sol y sonrisa de oreja a oreja.
La serie de preguntas, en la que todos los representantes de la farándula hacen comentarios más sesudos que los de Obama, concluye con el anuncio "Celeb", lanzado el miércoles, y en el que se compara al "presidenciable" demócrata con Britney Spears y Paris Hilton.
"Los republicanos están construyendo una imagen negativa de Obama como hicieron con (el aspirante demócrata a la Casa Blanca) John Kerry en el 2004, a quien presentaron como un elitista desconectado del estadounidense medio", dijo a Efe Thomas Schwartz, profesor de la Universidad Vanderbilt (Tennessee).
La pregunta sobre la rúcula y la cadena de productos ecológicos, que ciertamente no figuran entre las opciones más populares en el paraíso de la comida rápida, trataría de proyectar esa imagen elitista.
Obama, mientras tanto, se ha limitado a encajar los golpes bajos y defenderse enérgicamente aunque sin seguir por el momento los pasos de la campaña de su rival republicano John McCain.
El senador demócrata dice no querer recurrir a los viejos trucos políticos y mantiene que la suya será una campaña positiva articulada en torno a su mensaje central de "cambio y esperanza".
Los expertos advierten que las campañas negativas funcionan y apuntan que Obama podría verse forzado a revisar su estrategia pero alertan también del arriesgado rumbo por el que ha optado McCain.
Bruce Gronbeck, profesor de la Universidad de Iowa, dice que desde las presidenciales de 1988 -en las que George H.W. Bush padre compitió y ganó contra Michael Dukakis- los republicanos han utilizado los anuncios negativos de forma recurrente.
"El 80 por ciento de los anuncios de la campaña de Bush (padre) fueron negativos", dijo a EFE Gronbeck, quien señaló que desde entonces la derecha estadounidense ha utilizado con éxito el recurso del ataque político.
Los demócratas, por el contrario, han preferido desde principios de la década de los 30 con la llegada al poder de Franklin D. Roosevelt proyectar la imagen de un futuro optimista, una apuesta visible y ganadora durante las campañas de John F. Kennedy, Jimmy Carter y Bill Clinton y que ahora defiende Barack Obama.
Gronbeck dice que los republicanos podrían ganar al tratar de instigar miedo y generar ansiedad entre los votantes insistiendo en la limitada experiencia de Obama, que cumple el lunes 47 años y lleva pocos más de tres años como senador en Washington.
Aun así, el académico pronostica que a McCain le resultará difícil llegar a la Casa Blanca sin articular un mensaje positivo, que deje claro cuál es el futuro que ofrece más allá de la exploración petrolífera de alta mar y la permanencia de las tropas en Irak hasta la victoria.
James McCormick, director del Departamento de Ciencias Políticas de la Universidad Estatal de Iowa, señala, de todos modos, que en estos momentos la mejor opción de McCain es el ataque.
"El viento sopla claramente a favor de Obama y los demócratas este año", dijo a Efe McCormick, quien destaca que, aun así, hay un gran grupo de votantes que alberga dudas sobre Obama y tiene lógica política el tratar de explotarlas.
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