Las cajas pueden pedir "desde este momento" capital público

Elena Salgado afirmó que las cajas de ahorro que tengan complicado alcanzar los nuevos requisitos de capital del Gobierno pueden pedir la ayuda al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) desde ya, sin tener que apurar el plazo fijado en el mes de septiembre.

"Si hay una entidad que sabe ya, que intuye ya que no va a poder conseguir esa cantidad adicional en los mercados privados, puede solicitar esa ayuda pública desde este momento. Pero insisto, no ha cambiado nada, septiembre sigue siendo la fecha límite, quien crea que pueda conseguir los fondos puede perfectamente esperar hasta septiembre", dijo durante una entrevista en la Cadena Cope .

A principios de la semana pasada, la ministra de Economía anunciaba un plan para imprimir mayor ritmo a la reestructuración de las cajas de ahorro, aplicando criterios de solvencia más severos (capital principal de hasta un 9 o 10% para entidades no cotizadas) y admitiendo necesidades de capital de hasta 20.000 millones de euros.

Estas noticias produjeron movimientos casi inmediatos en el sector, destacando entre todos la reorganización de La Caixa, que traspasará su negocio bancario al holding de participaciones Criteria.

Asimismo, Salgado destacó que el crédito a las empresas y a las familias tiene que llegar en mayor grado y para ello las instituciones financieras han de ser "solventes" y "parecerlo", a fin de poder financiarse en los mercados mayoristas de financiación. "Por eso hay que continuar con la reforma del sistema financiero", resaltó. No obstante, recordó que niveles de crecimiento como los de hace cuatro años, cuando los aumentos rondaban el 20%, "no son razonables".

La visita de Merkel "no es para saber si España hace bien los deberes"

La titular de Economía y Hacienda defendió que las reformas se están haciendo "para crecer y crear empleo" y rechazó que se hayan impuesto desde fuera. En este sentido, Salgado dijo que la visita que el jueves efectuará la canciller alemana Angela Merkel "no es para saber si España hace bien los deberes". Por ello, negó que España esté perdiendo competitividad como lo demuestra que no se ha perdido presencia en el mercado internacional y no han decaído las exportaciones.