La peruana Rocío Torres Carcasi, compradora de una finca del torero español retirado José Ortega Cano, es propietaria de una mina de oro que factura 50 millones de dólares anuales (unos 37 millones de euros). La compra de la finca de ochocientas hectáreas, en la que Ortega Cano vivió con la fallecida cantante Rocío Jurado se concretó el pasado 19 de julio, a través de una nueva empresa constituida por Torres en Sevilla, según detalló el periódico La República. El precio, según ese medio, fue de ocho millones de dólares (casi seis millones de euros).

José Ortega Cano había adquirido la finca Yerbabuena en 1992 a otro torero, Juan Antonio Ruiz Espartaco, por 1,8 millones de euros.

Torres Carcasi, es una empresaria de 28 años afincada hasta ahora en una localidad minera de la región Puno, donde heredó las empresas auríferas Titán SAC y Titán Contratistas Generales después de que su hermano fuera acribillado a balazos en octubre del 2012, en plena carretera, cuando transportaba oro hacia la ciudad de Juliaca. La fortuna de la familia Torres reúne más de un centenar de terrenos mineros y propiedades inmobiliarias en Lima, Puno y ahora en España.

La compañía minera Titán fue fundada en 2003 por el padre de la joven, Percy Torres, tras trabajar como minero informal, figura en el puesto 455 del ránking de las 500 empresas más grandes de Perú, elaborado por América Economía, y según esa fuente la compañía factura 50 millones de dólares anuales. El fallecido fundador de la empresa compró en 2011 una hacienda en Puno, al sureste de Perú, de 3.500 hectáreas para la cría de ganado de lidia y suministraba toros a los ruedos del sur peruano.

No obstante, Percy Torres disfrutó poco más de un año de su paraíso taurino, tal como indicó La República, pues falleció en octubre de 2011 a los 46 años. Ahora la pretensión de Rocío Torres es pasar temporadas en España junto a su madre.

José Ortega Cano hizo grandes reformas en la finca Yerbabuena en unión de Rocío Jurado, ya que varió las zonas privadas de vivienda y la plaza de tientas y levantó unas instalaciones orientadas al turismo y la hostelería que se convirtieron en un museo en el que evocar a la cantante fallecida.