La directiva del Barcelona recuperará la figura del vicepresidente deportivo, según confirmó hoy en París el presidente del club, Joan Laporta, un cargo que desapareció en junio de 2005 cuando Sandro Rosell presentó su dimisión por desavenencias con el máximo dirigente barcelonista.

Laporta, además, también tiene previsto anunciar el próximo lunes una serie de cambios de función en el seno de la junta directiva del club.

"Una de las reestructuraciones que anunciaré será el nombramiento de un vicepresidente deportivo y una reestructuración de la responsabilidad de algunos compañeros de junta", ha asegurado hoy el dirigente azulgrana tras la firma de una convenio del club catalán y la UNESCO para el desarrollo de programas educativos.

En todo caso, no está previsto que se incorporen nuevos directivos, sino que un miembro de la actual junta sea quien se haga cargo de la vicepresidencia deportiva.

La gestión del caso Edmilson ha desembocado en la decisión adoptada por Laporta. El brasileño realizó unas declaraciones a TV3 en las que denunciaba diferentes actitudes de sus compañeros de vestuario y apuntaba a la existencia de "una oveja negra".

Hasta la fecha, la responsabilidad del área deportiva, por debajo de Joan Laporta, recaía en Txiki Begiristáin, quien era el nexo de unión entre la directiva y el entrenador Frank Rijkaard.

Esta tarea la desempeñó en el pasado Sandro Rosell, aunque cuando éste dimitió, el presidente del Barcelona anunció que las funciones de Rosell las podía asumir la junta directiva, sin que fuera necesario destinar exclusivamente un directivo para estas funciones.