Aznar no desea alimentar la polémica e ignora a quienes "sobreactúan"

El ex presidente del Gobierno español José María Aznar ha afirmado en Bogotá que no desea alimentar la polémica generada en la Cumbre Iberoamericana y anotó que "ignora" a quienes le insultan y "sobreactúan".

Sin mencionar un sola vez al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, por su nombre, Aznar afirmó que es "lo suficientemente mayor como para saber que hay unas personas que tienen que sobreactuar por razones internas o porque no pueden comportarse de otra manera".

El ex presidente español, que se encuentra en Bogotá, donde hoy presentó el "Informe América Latina; una agenda de libertad", de la fundación FAES, que preside, hizo estas afirmaciones en una entrevista concedida a la cadena de televisión institucional del Senado colombiano.

En ella, Aznar manifestó su agradecimiento al Rey Juan Carlos y al presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, por haberle defendido en la cumbre de las reiteradas acusaciones que Chávez hizo contra él llamándole "fascista".

Opinión sobre la política exterior de España

Afirmó que es lo que debía hacer desde el punto de vista personal, aunque matizó que "otra cosa es el juicio político que merezca la política exterior de España en este momento".

Opinó que "el Rey es una persona, un personaje instalado de alguna manera en la Historia, sin la cual es imposible explicar la España de los últimos años; el Rey es un rey de la democracia".

Ante la insistencia de la periodista en preguntarle directamente por Chávez, respondió que no tenía por qué personalizar, "las personas que creemos en la libertad tenemos que expresar nuestra opinión".

Dijo que es "lo suficientemente mayor para saber que hay regímenes e ideologías que sólo pueden vivir de los enemigos externos" y agregó que no va "a dar aliento a todas esas cosas ni a disparates ni a calumnias ni a todos esos temas".

Cuando se le preguntó si se estaba hablando de Chávez, por el contenido del informe que presentó, en el que se advierte sobre los riesgos de una América con el socialismo del siglo XXI, el caudillismo, la demagogia, el polulismo, respondió que "estamos hablando de lo que hay; yo no tengo por qué personalizar, pero estamos hablando de lo que hay y existen esos intentos".

Anotó que en la vida política "puede haber gente que esté en esos intentos" y gente que "está en contra" de ellos.

El futuro de Iberoamérica 

Advirtió además de que Iberoamérica está en una encrucijada y que tendrá que "dar pasos muy determinantes para su futuro".

Aznar manifestó su preocupación por el futuro de las cumbres iberoamericanas y señaló que los países participantes tienen mucho que decir en un mundo globalizado.

En su opinión la libertad, la economía libre, el tener empresas, es mejor, así como tener "seguridad jurídica, reglas claras, instituciones más fuertes, porque los países son mejores" y defendió la conveniencia de limitar los poderes porque, afirmó, "nadie puede tener poderes absolutos".