El hasta ahora portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, ha afirmado hoy que no hay duda de que el secuestro de los cooperantes Enric Gonyalons y Ainhoa Fernández de Rincón en los campamentos saharauis de Tinduf (Argelia) es obra del grupo Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).

De Arístegui, en declaraciones a Efe, ha argumentado que si bien no hay precedentes de raptos en la zona controlada por el Frente Polisario, los indicios apuntan a AQMI.

La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha reiterado hoy, en Rabat, que "no quiere especular sobre la autoría" del triple secuestro, ya que, añadió, "mi condición como ministra no me permite hacer afirmaciones sobre quiénes pueden ser los autores. Mi obligación es trabajar para conseguir su liberación".

"Trinidad Jiménez ha pedido prudencia sobre el análisis de quién puede ser el autor. Pero blanco y en botella. Es complicado no decir que puede ser AQMI", ha asegurado el político del PP.

Gonyalons y Fernández de Rincón fueron raptados por un grupo armado en la noche del pasado sábado en un campamento cercano a Tinduf junto con una voluntaria italiana.

Su secuestro se une al de las también cooperantes Blanca Thiebaut y Montserrat Serra, de Médicos sin Fronteras (MSF), capturadas el pasado día 13 en el centro de refugiados de Dadaab (Kenia), a unos 100 kilómetros de Somalia, sin que tampoco se conozca la autoría.

De Arístegui ha lamentado que los ciudadanos españoles se hayan convertido en objetivo de la piratería y de redes vinculadas a Al Qaeda debido en gran medida a la actuación del Gobierno socialista a la hora de solucionar los raptos que ha habido hasta ahora.

"Tengo que ser muy prudente sobre la actuación en el pasado del Gobierno respecto a piratas y terroristas. Pero creo que de aquellos polvos tienen esos lodos", ha opinado.

No obstante, ha matizado que no quiere "interferir en la necesaria autonomía que tiene que tener el Gobierno en funciones para tratar de resolver esta crisis y traer sanos y salvos a los compatriotas a casa".

De Arístegui ha subrayado que hay que actuar desde "la más absoluta firmeza" ante el terrorismo y el crimen organizado.

También ha pedido a los cooperantes que sean "prudentes" en el Sahel -la región que cruza África al sur del Sáhara- al no haber "ningún sitio seguro" de la acción del terrorismo yihadista.

Ha considerado preciso que el Ejecutivo que salga elegido de los comicios del 20 de noviembre llegue a un pacto de estado con la oposición en la lucha contra el terrorismo internacional y la piratería.

"Es una realidad que supone un peligro cierto e inminente para Europa y España", ha advertido.

AQMI fue la organización que secuestró a los cooperantes catalanes Albert Vilalta, Roque Pasqual y Alicia Gámez en diciembre de 2009.

A los dos primeros los retuvo durante casi nueves meses, mientras que Gámez estuvo en cautiverio algo más de dos.