Alemania comenzó el domingo la búsqueda de su cuarto Mundial con un contundente triunfo por 4-0 ante Australia, en el segundo partido del Grupo D.

Los delanteros Lukas Podolski y Miroslav Klose pusieron un resultado parcial de 2-0 al descanso, reivindicando la confianza que el seleccionador Joachim Löw puso sobre ellos a pesar de su falta de gol en los últimos partidos.

El extremo Thomas Mueller y el suplente Cacau completaron la goleada tras el descanso.

Australia, que comenzó en los dos tiempos brillantemente y luchando valientemente, jugó los 34 últimos minutos con un hombre menos por la expulsión de Tim Cahill tras cometer una falta sobre Bastian Schweinsteiger.

Alemania lidera el Grupo D por delante de Ghana, que batió a Serbia por 1-0 en el partido que abrió el grupo anteriormente en Pretoria.

El tridente formado por el capitán Philipp Lahm, Mesut Ozil y Mueller sentó las bases de la victoria con un joven equipo alemán entrando por las bandas para flanquear la tan elogiada defensa australiana.

En el minuto ocho, Ozil encontró a Mueller, que parecía estar en fuera de juego, y su recorte permitió a Podolski enviar el balón a la red con un contundente disparo.

Klose pudo haber aumentado la ventaja en el minuto 24 cuando falló una clara ocasión después de que un pase cruzado de Podolski le dejase solo delante del portero, pero pudo resarcirse tan solo dos minutos después.

Lahm envió un centro muy elevado desde la derecha, el portero australiano Schwarzer salió pidiendo el balón pero Klose se le adelantó y cabeceó a puerta vacía consiguiendo su gol número 49 como internacional.

Con el espíritu australiano minado por la expulsión de Cahill, Mueller obtuvo su recompensa por su gran actuación en la banda derecha en el minuto 68, cuando se hizo un hueco y envió el balón a la red tras pegar en el palo.

Cacau, que acababa de ingresar en el terreno de juego sustituyendo a Klose, completó la goleada dos minutos después de que Ozil evitase el fuera de juego y cediese al delantero del Sttutgart.