Funcionarios de la Guardia Costera dijeron el domingo que rescataron a 63 personas entre pasajeros y tripulantes de un ferry que se hundió frente a la región central de Filipinas, el segundo accidente en menos de una semana, aunque al menos unas 25 personas permanecen desaparecidas.

Tres barcos que pasaron por el área recogieron a los sobrevivientes, dijo a periodistas el teniente comandante Armando Balilo, mientras que aviones de vigilancia costera y helicópteros se unieron en las operaciones de búsqueda y rescate en aguas frente a la isla Verde, en la región central de Filipinas.

"Esperamos encontrar más sobrevivientes. Continuamos la búsqueda de unas dos docenas aún desaparecidos", aseguró Balilo.

El ferry transportaba a unas 88 personas y nueve camiones de carga, cuando salió de Calapan, en la isla central de Mindoro, en un viaje de dos horas hacia el puerto de Batangas en la isla principal de Luzón, la noche del sábado.

"Sucedió muy rápido. Estaba durmiendo en un banco, pero de pronto me encontré aferrado a un flotador", dijo en una entrevista de radio el pasajero Eric Musngi, luego de que un barco de rescate llevó a algunos de los sobrevivientes al puerto de Batangas.

"Había docenas de personas en el agua pidiendo ayuda y gritando los nombres de miembros de sus familias y parientes. No sé qué pasó con mi madre y mi hermana mayor", agregó.

Tres personas murieron y otras 24 permanecen desaparecidas, luego de que el jueves un barco con casco de madera colisionó con un bote pesquero cerca de la boca de la bahía de Manila.

El clima estaba despejado al momento del accidente y los funcionarios de la guardia costera dijeron que investigarían la causa.

Los ferries son un importante sistema de transporte en Filipinas, un archipiélago de más de 7.100 islas. Pero los accidentes son comunes porque viajan con demasiados pasajeros, además de una pobre mantención y tormentas tropicales.