Aguirre, de la vuelta a la 'Champions' al despido en seis meses

El mexicano Javier Aguirre, destituido hoy como entrenador del Atlético de Madrid, cerró su etapa en el club después de dos temporadas y media, en las que presentó buenos números, los mejores desde el 'doblete' de 1995-96, y dirigió el regreso del equipo a la Liga de Campeones más de once años después.

Hoy, seis meses después de cumplir ese objetivo, tras superar la ronda previa del máximo torneo continental ante el Schalke alemán, y de situar al conjunto madrileño entre los dieciséis mejores de Europa, la ausencia de victorias en los últimos cinco partidos de Liga más la eliminación de la Copa del Rey provocaron su despido.

Ha sido el fin de una trayectoria con altibajos en el Atlético, en el que vivió momentos comprometidos para su continuidad, aunque casi siempre reaccionó a tiempo y cumplió con las metas marcadas, entre ellas la clasificación para el máximo torneo continental o la cuarta plaza del curso 2007-08, sus mayores éxitos como rojiblanco.

También afrontó días amargos, como la peor derrota como local de la historia del Atlético con el 0-6 contra el Barcelona del 20 de mayo de 2007 o el 6-1 recibido en el Camp Nou el pasado mes de octubre, y polémicos, como el 'no' a la llegada del argentino Juan Román Riquelme en el verano de 2007.

Un séptimo puesto en 2006-07, una cuarta plaza en 2007-08 y la actual séptima posición de esta campaña, a cinco puntos de la Liga de Campeones, han resumido su trayectoria liguera con el Atlético, con el que ha disputado 97 choques, con un balance de 45 triunfos, 21 empates, 31 derrotas, 156 goles a favor y 119 en contra.

En Europa, a su eliminación inesperada de 2007-08 en los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA ante el modesto Bolton le ha seguido una brillante actuación en la Liga de Campeones este curso. Invicto y clasificado como segundo del grupo D, sólo superado por el Liverpool inglés, ahora le espera el Oporto en octavos.

Menos convincente fue el equipo en Copa del Rey, en la que los cuartos de final fueron su límite. Hasta allí llego la pasada campaña, en la que fue eliminado por el Valencia, pero se quedó antes en sus otras dos temporadas como rojiblanco en ese torneo, en octavos de la competición.

En total, ha dirigido 129 encuentros oficiales con el Atlético entre Liga, Copa del Rey, Intertoto, Copa de la UEFA y Liga de Campeones, con 60 triunfos, 31 empates y 38 derrotas, con 203 goles a favor y 144 en contra, desde su llegada al club en mayo de 2006.

Desde ese día asumió el reto de recuperar el sitio del Atlético tanto en España como en Europa. No lo había conseguido el equipo desde su descenso a Segunda División, en 1999-2000. Desde el regreso a Primera en 2002-03, el equipo completó cuatro cursos decepcionantes en posiciones menores de la tabla.

En ese panorama, en el que habían caído cinco entrenadores en cuatro años, Aguirre asumió el inestable banquillo rojiblanco con el regreso a la Copa de la UEFA como primer objetivo en 2006-07, aunque una gris segunda vuelta le arrebató la sexta plaza en la penúltima jornada y le condenó a disputar la Intertoto.

El club le mantuvo en el cargo para la siguiente temporada. Era la primera vez desde el regreso a Primera División que un técnico aguantaba más de un año en el banquillo del Atlético, con el que consiguió la clasificación europea vía Intertoto en el verano de 2007 con un sufrido triunfo en casa frente al Gloria Bistrita (1-0).

El cumplimiento de ese objetivo, imprescindible para la continuidad del técnico, puso fin a la ausencia más larga del Atlético -siete años- de los torneos continentales y agrandó la exigencia para ese curso, en el que fue eliminado en dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA y en cuartos de la Copa del Rey.

En Liga, en cambio, sí consiguió la meta en su segundo curso como rojiblanco: la 'Champions'. Hasta allí llegó el Atlético más de once años después, tras finalizar en la cuarta posición de la tabla con los mejores registros de puntos y victorias desde el histórico 'doblete' de 1995-96, la última vez que el club levantó un título.

Su renovación por un año más fue automática por incluir al equipo en la máxima competición continental. "Yo soy un convencido de los proyectos. Siempre he trabajado conforme a un proyecto y a un trabajo a largo plazo. Y en el Atlético no será la excepción", dijo tras firmar por una temporada más como técnico del club madrileño.

En el horizonte estaba la eliminatoria previa de la Liga de Campeones contra el Schalke 04 alemán, remontada en el Vicente Calderón con un 4-0 tras el 1-0 de la ida en terreno germano, y una temporada con nuevas ilusiones y exigencias, entre ellas estar de nuevo entre los cuatro primeros de la clasificación.

Ahí llegó en el tramo final de 2008, apoyado en una racha de nueve partidos consecutivos sin perder en Liga -quince oficiales-, pero el inicio del nuevo año, con cinco encuentros seguidos sin ganar en esa competición y con la eliminación de la Copa del Rey, precipitó su destitución tras la derrota contra el Valladolid (1-2).