Aguirre se resigna con Gallardón

Cerca de tres años y medio después de que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, entonara su famoso discurso de "No me resigno", parece que va a tener que hacerlo ahora, al menos con el hecho de que su eterno rival interno, Alberto Ruiz-Gallardón, vaya en la lista por Madrid.

En el PP todo el mundo da por seguro que el regidor madrileño acompañará a Mariano Rajoy al Congreso en esta ocasión. Y la dirigente conservadora no está ya, como lo estuvo en la anterior convocatoria electoral, en condiciones de plantarle un órdago a su jefe de filas. La situación, recalcan varios dirigentes, ya no es la misma. Si amagara con renunciar al Gobierno regional para ir en las candidaturas, el líder del PP no se opondría. Con todos los sondeos a su favor, ya no teme que un escaño se convierta en trampolín sucesorio.

"No hay ningún resquemor a que pueda ir", asegura Ignacio González

Después de realizar un discurso totalmente ortodoxo en apoyo a Rajoy en la Convención de Málaga, Aguirre aseguró ayer que mantiene una "magnífica" relación con Gallardón y reconoció que lo que decida su partido le parecerá "estupendamente bien".

La lista por Madrid se conocerá previsiblemente a finales de esta semana. Fue lo que dijo ayer la vicesecretaria de Organización, Ana Mato, cuando le preguntaron por este tema en un desayuno informativo en La Razón. La mayoría del partido sitúa al regidor entre los cinco primeros puestos. Mato señaló que eso no tenía importancia y que lo fundamental era formar parte del equipo en el que, presumió, estarán "los mejores".

En el PP de Madrid creen que subirán de 18 a 21 diputados en esta convocatoria

La elaboración de esta lista es una de las más complicadas. Va encabezada por Mariano Rajoy y, por eso mismo, como admitió ayer Aguirre, en esta, "tradicionalmente", tiene mucho que ver la dirección nacional del PP.

Desde la formación regional creen que van a subir de 18 a 21 diputados, lo que da margen para que entre todo el mundo. Pero aún así está reñido. Con la salida de Manuel Pizarro, Eduardo Zaplana y Cristóbal Montoro (ahora número uno por Jaén) hay huecos. Piensan que Rajoy no desplazará a los críticos porque no ha tenido ningún reparo en incluir a Ignacio Astarloa en ella.

Aguirre aseguró que los "rifirrafes" que ha tenido con Gallardón han sido por defender cada uno su institución. Y cuando le preguntaron si lo veía como ministro sólo apuntó que de ser ella Rajoy "no hablaría ni con el cuello de la camisa" sobre a quién va a dar una cartera en caso de gobernar. Con la vista puesta en una victoria el 20-N, hasta el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, aseguró en Onda Cero que no había "ningún resquemor" con que fuera Gallardón.