62 senadores declaran tener actividad privada

La relación de actividades extraparlamentarias de los senadores se guarda en un archivador metálico que contiene copia de la declaración que cada senador entrega a la Cámara al incorporarse a su escaño. Los originales se custodian en una caja fuerte.

Público ha abierto estos archivos. Un total de 259 senadores componen la Cámara. De ellos, 90 declaran no tener ninguna actividad secundaria. De los 62 que admiten su relación con el sector privado, 48 tienen que ver con empresas y los 14 restantes compaginan su escaño con despachos profesionales, sobre todo de abogacía.

Por el carácter territorial del Senado, 104 senadores declaran su condición de cargos electos en ayuntamientos o parlamentos autonómicos. Otro grupo simultanea su labor pública con una extensa relación de tareas que van desde la docencia a la que se dedican ocho senadores, a la presencia en fundaciones 13 parlamentarios pasando por colaboraciones en prensa o conferencias, dedicación que declaran 34 senadores.

La comisión de Incompatibilidades del Senado revisa estas actividades para garantizar que las empresas que gestionan los senadores no trabajen con la Administración y que los parlamentarios no perciban más de un sueldo público.

Todos los grupos políticos, con la excepción del PP, un parlamentario de CC y otro de CiU, han accedido a la invitación hacer públicas las cuentas privadas de sus senadores. La dirección del Grupo Popular rechazó la propuesta.

Su bancada la compone un ejército de pluriempleados que dobla el número de parlamentarios del resto de grupos que admiten segundas actividades. Más de la mitad de los senadores que declaran su vinculación con sociedades privadas pertenecen al PP suman 35. 12 de los 14 parlamentarios que trabajan como abogados o asesores ocupan los escaños conservadores.

"No empezar de cero"

"Dedico las 24 horas del día a mi actividad pública", explica Francisco Abellán, senador del PSOE por Murcia y administrador de fincas. Es también alcalde de Jumilla y presidente de dos sociedades municipales. "Tengo cuatro empleados a media jornada que llevan la oficina", explica Abellán, que inició esta actividad en 1988 y la mantiene para "no empezar de cero" si un día abandona la política.

También administrador de fincas, Josep Maldonado, senador de CiU por Tarragona, enfatiza este aspecto: "En política, hoy estás y mañana no. Era mi profesión y la dejé aparcada para centrarme en la actividad pública; hace años que no paso por el despacho".

104 son, además, cargos electos en ayuntamientos o autonomías

Maldonado asegura no percibir ingresos por esta actividad, ni sacrificar horas de Parlamento en aras del interés privado: "Soy senador al 150% de lunes a domingo".

Otro senador con despacho privado es Francisco Javier Ramis, socialista, elegido por Mallorca y arquitecto técnico. Declara esta profesión y una sociedad al 60% "que gestiona esta actividad".

Cuando ocupó su escaño llevaba la dirección de "tres o cuatro obras" que mantuvo al incorporarse a la Cámara porque "podía acarrear gastos a clientes con los que tienes un compromiso". Un ayudante lleva su oficina.Desde que tomó posesión como senador ha asumido únicamente otro encargo particular. La ley no le permite trabajar para las administraciones públicas.

¿Hay que aparcar la vida civil para colgarse el traje de senador? Vicente Llanos, representante socialista por Cáceres, cree que no. Fue alcalde del municipio cacereño de Miajadas 16 años. Ha dejado el bastón de mando, pero no el mono de trabajo, porque confiesa que es "de los que se sube al tractor".

"Tener los pies en el suelo"

Llanos cultiva una explotación de 30 hectáreas de riego. "Dedico al campo mi tiempo libre porque soy agricultor de profesión". Este senador defiende que en la política deben estar representadas "todas las condiciones". La suya le permite, según dice, "tener los pies en el suelo" en la comisión de Agricultura, a la que está adscrito. "Te da una visión real, porque una cosa es la teoría y otra la práctica", explica para justificar su actividad extra.

"La ley no impide las actividades complementarias subraya Joan María Roig aunque es exigible toda la transparencia posible, por eso me parece muy bien que se sepa a qué nos dedicamos". Roig es senador de CiU designado por Catalunya. Es uno de los parlamentarios que más actividades declara: cinco sociedades. Una gestiona tres locales comerciales, otra fabrica troqueles para embalajes, con el 10% de una tercera promueve la construcción de un hotel y la cuarta gestiona el patrimonio familiar "cinco pisos". Roig es, además, socio de un comercio familiar, "una tienda" de papelería.

Declaración de bienes

También cree obligado por su cargo concretar cada detalle de su actividad Francisco Javier Irízar, senador socialista por Guadalajara. "Tengo un despacho de abogados que fundó mi padre en el año 39 o 40, aunque llevo pocas cosas". Allí trabajan tres empleados. El senador declara, además, tres sociedades. Una es titular del 50% de un hotel en Guadalajara, ahora alquilado a una cadena. Las otras dos "no ejercen actividad económica, aunque administran un patrimonio importante". Esos bienes inmuebles y acciones se declaran también de forma obligada a la Cámara al tomar posesión del escaño, aunque su acceso no es público, como sí lo es el registro de actividades.

"Tengo un despacho de abogados que fundó mi padre, aunque llevo pocas cosas"

Si Irízar heredó un bufete, Jordi Guillot, senador de ICV por Barcelona es propietario del 33% de una sociedad familiar también "por herencia", un aparcamiento que gestiona su familia. Miembro también de LEntesa, Josep María Esquerda, de ERC aclara su participación del 60% en MOE S.L. "Es una tienda de muebles de oficina, en la que trabaja mi hijo". Otro negocio familiar.

El cargo obliga

Otros senadores forman parte de empresas privadas como miembros electos de corporaciones locales o autonómicas. Javier Losada, socialista, es senador y alcalde de A Coruña. No cobra por su presencia en el patronato de la Fundación Caixa Galicia, "dos reuniones al año". Sí percibe dietas por su actividad en el consejo de administración de R Galicia, una empresa gallega de telecomunicaciones participada por el ayuntamiento, en la que ejerce "una actitud vigilante de los intereses y el patrimonio de todos los coruñeses en función de mi cargo".

Alcalde es también José Miguel Palazuelo, senador por León y regidor de La Bañeza. Percibe "entre 180 y 200 euros" netos de dieta por asistir a la Asamblea General de Caja España, de la que es consejero. El año pasado celebraron una sola reunión.

Muchos senadores participan en las cajas de ahorro por su cargo municipal. La misma cantidad que Palazuelo percibe otro senador leonés del PSOE. José Arsenio Giménez también es miembro de la Asamblea General de Caja España, donde desembarcó como concejal del municipio berciano de Cacabelos. "Nos reunimos los sábados por la mañana, para que no interfiera en otras actividades", explica.

El invento del senador

Giménez participa también en la sociedad Iberwat Plus. "Es una patente que diseñaron unos amigos y que está en fase de homologación". El invento que garantiza un segundo uso para aguas derivadas del uso doméstico, "sólo conlleva, de momento, gastos", según admite Giménez.

Al igual que Losada o Palazuelo, el senador Antonio Gutiérrez compagina el senado con una alcadía. Al frente del ayuntamiento sevillano de Alcalá de Guadaíra, este socialista participa en tres sociedades municipales por las que no percibe "ni dietas, ni remuneración". "Son inherentes al cargo de alcalde justifica y empresas públicas al 100%".

"Entiendo que cobro del Senado y no de otro sitio"

Pública es también la Corporación Aragonesa de Radio y Televisión. José María Becana, senador del PSOE por Huesca, declara 371 euros brutos por dietas y kilometraje. Se reúnen la tarde del tercer lunes de cada mes durante dos horas. "Es una prolongación del servicio público complementario a mi trabajo como senador", defiende.

"Entiendo que cobro del Senado y no de otro sitio", explica Yolanda Vicente, senadora socialista por Álava y consejera en la Asamblea General de Caja Vital-Kutxa. La senadora dona a su partido el importe de las dietas que percibe. "Son ciento y pico euros, algo simbólico".

Bastante más alta es la dieta que ingresa Joan Sabaté, del PSC, como consejero de la Asamblea General de Caixa Catalunya. "Es una reunión al año, pero la dieta es alta, unos 1.000 euros brutos". Su paso por la alcaldía de Tortosa le llevó a la institución.

Sociedades de gestión, entidades financieras, despachos de abogados... Jordi Casas, senador de CiU designado por Catalunya declara la actividad de abogado "porque estoy colegiado, pero no ejerzo, no tengo despacho".

Casas tiene otra actividad declarada que le distingue del resto de senadores: es cantante. Miembro del grupo de habaneras Mariners de Riera, ha grabado tres discos "el último con Lucrecia". Lleva 27 años con esta actividad paralela aunque está lejos de los discos de platino: "Con lo que sacamos, nos da para una cena con los amigos al año".