El cierre de una planta y la falta de personal colapsan el Hospital de Getafe: "Los pacientes duermen en el pasillo"

Los pacientes pasan hasta dos o tres noches durmiendo en colchonetas en los pasillos, sin almohadas y en condiciones precarias. El personal sanitario, desbordado por la falta de recursos humanos, debe asumir varias tareas simultáneamente, con contratos que no garantizan días de descanso entre turnos y enfrentando una carga excesiva de guardias. 

Esta es la realidad en el Hospital Universitario de Getafe, tal y como la describe a Público una de las trabajadoras del centro madrileño que ha preferido mantener su anonimato por temor a represalias. La Coalición Sindical Independiente de Trabajadores-Unión Profesional (CSIT) ha denunciado a través de redes sociales la situación de saturación y sobrecarga a la que se enfrentan los sanitarios. El sindicato narra a este medio que, ante sus reclamos, la respuesta de la gerencia y de dirección sigue siendo la misma: "La saturación no es constante; varía en picos".

Y desmiente esta justificación: "La saturación es casi diaria en Urgencias". Informa que este problema lleva años afectando al hospital madrileño, impulsado por varios factores: "El envejecimiento de la población, el debilitamiento de la atención primaria, y, desde la apertura del Hospital Universitario Infanta Cristina en Parla (Madrid) en febrero de 2008, se redujo el personal en el hospital de Getafe bajo el argumento de que el centro tendría menos pacientes que atender". 

Según la trabajadora del centro, la situación empeora los fines de semana, ya que una unidad de cirugía que opera de lunes a viernes cierra durante esos días. Como resultado, "los pacientes operados el viernes que no reciben el alta, junto con aquellos de días previos que aún no están en condiciones de irse a casa, deben ser reubicados en distintas unidades del hospital". Asegura que esto deja pocas o incluso ninguna cama disponible para los nuevos ingresos procedentes de Urgencias. 

Trabajadora en el hospital de Getafe: "Las ratios en esta urgencia superan las recomendaciones de la Sociedad Española de Enfermería de Urgencia y Emergencia"

Explica que, según las recomendaciones de la Sociedad Española de Enfermería de Urgencia y Emergencia, para asegurar una atención de calidad en Urgencias debería haber un técnico en cuidados auxiliares de enfermería por cada seis pacientes y un enfermero o enfermera por cada cuatro. "Actualmente, las ratios en esta urgencia superan con creces esas recomendaciones", advierte. 

La sección sindical de CCOO en el hospital de Getafe ha informado a Público que el pasado 4 de noviembre el director de gestión les comunicó la suspensión de nuevas contrataciones. Según explican, el directivo señaló que no se cubrirán bajas por días de libre disposición, ni permisos adicionales relacionados con la antigüedad o el ingreso de familiares.

"La dirección nos informó que solo se cubrirán las bajas a partir del día 16 de ausencia; sin embargo, sabemos de casos de bajas superiores a 16 días que aún no han sido cubiertas", admiten desde la sección sindical. Además, han trasladado al director que en algunos servicios la deuda en horas con el personal supera las 70-80 horas, lo que equivale a entre diez y 12 días de trabajo acumulados.

En julio de este año, el personal de Urgencias también presentó una denuncia ante el juzgado de guardia para exponer la situación que enfrentan a diario y deslindar su responsabilidad en posibles negligencias futuras. "Se envió copia a la gerencia, a la dirección de gestión y enfermería, así como a recursos humanos en la Consejería de Sanidad", informa la miembro de CSIT. Público se ha puesto en contacto con la Consejería de Sanidad, pero no ha recibido respuesta.

La dirección del hospital de Getafe ha informado a este medio que en los últimos días se ha observado un incremento puntual en la afluencia de pacientes en el área de Urgencias, motivado por un aumento de casos de patologías respiratorias. "Estamos reforzando todos los recursos disponibles en Urgencias para asegurar una atención de calidad, dando prioridad a los pacientes de acuerdo con la gravedad y el tipo de sus dolencias", asegura.

"La atención en el servicio de Urgencias se está brindando con total normalidad", responde la dirección del centro

Asimismo, informa que se han puesto en marcha medidas organizativas para acelerar las altas en las plantas de hospitalización, con el objetivo de facilitar el ingreso de nuevos pacientes procedentes de Urgencias. "En cualquier caso, la atención en el servicio de Urgencias se está brindando con total normalidad", afirma, pese a las denuncias de los trabajadores sobre la sobrecarga y saturación que afecta al sistema de salud público.

Cierran una planta de medicina interna

En el verano posterior a la pandemia de la covid-19 se cerró la unidad 3D del hospital especializada en medicina interna. "Como alternativa, se obligó al personal de esa planta a rotar por distintas unidades para cubrir las vacaciones", señala la trabajadora. Explica que esta cobertura vacacional sigue el mismo esquema que en 2019, a pesar de que las necesidades actuales son distintas. "En Urgencias, tenemos ahora 14 trabajadores más que en 2019, personal cuya cobertura durante las vacaciones no está prevista", añade.

En noviembre de 2022, desde la CSIT se envió una carta a la gerencia del hospital denunciando los problemas que esta situación causaba al personal. "El cierre de la planta ha provocado que el resto de las unidades se vean desbordadas con patologías que no corresponden a su especialidad. Muchas de estas unidades tienen camas cerradas, que solo se abren en caso de necesidad, pero no se aumenta el personal para cubrirlas", asegura el sindicato.

CSIT: "Los trabajadores asumen una carga adicional y aumenta el riesgo de cometer errores en la atención al paciente"

"Nos preocupa profundamente la falta de personal en los distintos turnos y la decisión de no cubrir las licencias por descanso (LD), licencias por tiempo (LT), vacaciones y bajas hasta que hayan transcurrido 15 días. Esta medida obliga a los trabajadores a asumir una carga adicional, lo que no solo afecta al rendimiento y la motivación, sino que también aumenta el riesgo de cometer errores en la atención al paciente, comprometiendo tanto la seguridad como la calidad del servicio", manifiesta. 

Además, la trabajadora del centro madrileño asegura que el cierre de la planta provoca que, en muchos días, la Urgencia General se colapse. "En ningún momento nos informan de que el cierre de la planta sea por falta de presupuesto, sino que se justifica diciendo que no hay suficiente carga asistencial para abrirla, aunque la urgencia esté llena de pacientes en los pasillos", lamenta. La gerencia ha comunicado al CSIT que la reapertura de la planta se llevará a cabo de manera progresiva y en momentos específicos, como en épocas de alta incidencia de gripe. "La mantendrán cerrada todo el tiempo que les sea posible", concluye la trabajadora.