"No se aplicó el protocolo de agresiones físicas y era evidente la falta de personal sanitario para atender y contener a los usuarios en caso de necesidad como esta. Pese a las advertencias en diferentes actas, sin embargo, la empresa había hecho caso omiso". Con estas palabras ha descrito Manuel Barroso, responsable de Salud Laboral de CCOO Sanidad Madrid, el contexto en el que el pasado 15 de febrero falleció un auxiliar de enfermería de la Fundación Instituto San José.

El TCAE, de 57 años, murió unas horas después de ser golpeado en los testículos por uno de los residentes del pabellón San Nicolás. Si bien la Orden de San Juan de Dios, propietaria y gestora del centro, informa a Público de que "la investigación no ha correlacionado el fallecimiento con la patada que recibió todavía"; desde CCOO ponen de relieve que "no es la primera vez que se producen agresiones físicas contra los trabajadores". 

"Nuestros delegados de Salud Laboral y Prevención de Riesgos habían requerido, al menos, en dos ocasiones en el Comité de Salud que había que incrementar la plantilla, que había que formar a los trabajadores para poder repeler las agresiones e implementar los protocolos que les obligaban a tener, y que la empresa nunca puso en marcha", detalla a este medio el sindicato.

CCOO lo ha denunciado ante la Inspección de Trabajo

La Fundación Instituto San José es un centro que lleva abierto 125 años, donde la mayor parte de las plazas son concertadas. El complejo está integrado por 14 edificios: una parte que es hospital, de cuidados intermedios donde hay varios programas, desde paliativos hasta tratamientos de enfermedades neurológicas, también hay un colegio concentrado de educación especial, dos centros de día y otros servicios como una residencia para personas con discapacidad intelectual. El accidente mortal tuvo lugar precisamente en este último edificio.

En estos momentos, está en marcha una investigación sobre lo ocurrido. CCOO ha denunciado ante la Inspección de Trabajo el caso y ha exigido que "se depuren responsabilidades civiles y penales por esta agresión con resultado de muerte". Por su parte, la Fundación Instituto San José, no obstante, insiste en que todavía no les ha llegado el comunicado de la denuncia. 

Las trabajadoras del centro, afirman fuentes delegadas de CCOO, se encuentran en estos momentos consternadas por la situación y aspiran a que este "terrible suceso" suponga un antes y un después respecto a su protección. En particular, ponen el foco en la necesidad de nutrir las plantillas con el personal suficiente: "Si en el momento en el que se produce la agresión hubiera habido más gente asistiendo a esos residentes (son en total 71), quizá hubiera sido posible contener mejor a la persona que perpetró la agresión o directamente no habría sucedido".