La convocatoria de la plataforma Somescola era a las 11 de mañana pero una hora antes ya se podía ver este sábado bastante gente alrededor del passeig de Sant Joan de Barcelona. Los accesos a la plaça Tetuán, punto de inicio de la convocatoria, han recibido una muchedumbre de gente que respondió a la llamada a movilizarse en defensa de la inmersión lingüística en catalán en las escuelas de Catalunya.

Pancartas y camisetas reivindicativas de la escuela en catalán, con especial visibilidad de unas grandes manos verdes características de Somescola con el lema de la convocatoria que llevaban muchos manifestantes, han predominado en la llamada marea verde que han formado miles de personas -35.000 según la Guardia Urbana- que se han manifestado bajo el lema "Ara i sempre, l'escola en català!" (¡Ahora y siempre, la escuela en catalán!).

La manifestación se ha desarrollado en un ambiente eminentemente familiar y en el que también ha participado numerosos docentes. En la protesta se ha podido ver alguna estelada pero sin demasiada proliferación de banderas, y de hecho ha habido algún debate entre participantes sobre la oportunidad de llevar o no la enseña independentista en una movilización que algunos manifestantes defendían que va mucho más allá de la reivindicación de la independencia. Los manifestantes han gritado consignas como 'Esta batalla la ganaremos' o 'Unidad y todos a una'.

Representación de familias de Canet

Especial atención ha recibido la delegación de familias de la escuela Turó del drac de Canet de Mar, algunas de ellas completamente vestidas de verde con disfraces del logotipo de este color característico que creó Somescola para la exigencia del catalán en la escuela. Un color verde que emula las grandes manifestaciones de la marea verde de las Illes Balears que tumbaron el TIL, el decreto del último Gobierno balear del PP presidido por José Ramón Bauzá que quiso restringir también el catalán a las escuelas. Las familias de Canet llevaban dos pancartas con lemas como "La escuela no se politiza, en el Turó del drac en catalán" o "Canet de Mar, la escuela en catalán".

La movilización liderada por Somescola contaba con un amplio apoyo social y político. Han participado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y buena parte de los miembros del Govern. También la presidenta del Parlament, Laura Borràs, y una amplia delegación de los partidos independentistas, ERC, Junts y CUP y también de En Comú Podem. El PSC pese a no desmarcarse de la movilización no ha enviado ningún cargo orgánico aludiendo a la celebración de su congreso extraordinario.

También han participado las cúpulas de los principales sindicatos, que aparte de la USTEC, mayoritario en la enseñanza también contó con UGT, CCO o la Intersindical, con sus secretarios generales a la cabeza, Camil Ros, Javier Pacheco o Sergi Perelló respectivamente, que defendieron la inmersión y denunciaron que "la judicialización de la cuestión forma parte de una estrategia del PP secundada por Ciudadanos y Vox".

La movilización también ha contado con el apoyo de muchas entidades de la sociedad civil lideradas por organizaciones como Òmnium, Plataforma por la lengua o la ANC. La convocatoria de Somescola ha sido la expresión unitaria en contra de la sentencia que obliga a impartir el 25% de clases en castellano en la escuela catalana rompiendo de esta forma lo que hasta ahora ha sido el modelo de inmersión lingüística en catalán. Una polémica que se ha focalizado estos días en la escuela Turó del drac de Canet de Mar pero que puede afectar al conjunto del sistema escolar de Cataluña.

Casado calienta la protesta y Aragonés estudia querellarse

En la movilización de este sábado se respiraba una mezcla de reivindicación y exigencia para que se mantenga la inmersión lingüística en catalán y de indignación por la campaña de descalificaciones y falsedades desatada desde la derecha española en contra de la escuela en catalán instrumentalizando el niño de 5 años de Canet de Mar cuya familia presentó la demanda del 25% de castellano.

Una estrategia que apenas este viernes calentaba los ánimos de la movilización cuando el presidente del PP, Pablo Casado, llegó a asegurar que "no se puede permitir que haya profesores con instrucciones para no dejar ir al baño a niños que hablen en castellano o ponerles piedras en la mochila si hablan castellano en el patio". Una afirmación que ha sido respondida por el president Aragonés anunciando que el Govern ha puesto esta difamación en manos de los servicios jurídicos de la Generalitat que estudiarán la viabilidad de una posible querella.

Una alumna, una madre y una directora leen el manifiesto

Aunque la previsión de Somescola era que la manifestación empezara en la plaça Tetuán y bajara por el passeig de Sant Joan, en buena parte del recorrido ya había gente antes de empezar. Una vez llegados al passeig Lluís Companys esta vía se ha llenado hasta los topes desde el Arc del Triomf hasta el escenario situado frente al parque de la Ciutadella donde se han hecho los parlamentos con la lectura del manifiesto de Somescola y diversas actuaciones como las de Joan Dausà, Su o Judit Neddermann.

La lectura del manifiesto ha corrido a cargo de tres mujeres: la madre de una alumna, una estudiante y la directora de un centro escolar de Barcelona. El texto leído define el aval del Tribunal Supremo a la sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya que obliga a todos los centros educativos catalanes a realizar un mínimo de un 25% de las clases en castellano, como "un nuevo intento de agresión al modelo de escuela catalana y su enfoque pedagógico.

Un modelo consolidado, garante de competencias lingüísticas y avalado ampliamente por la sociedad catalana a lo largo de décadas. Tanto los estudios como los datos sobre los resultados de la inmersión lingüística evidencian que es un modelo de éxito, tanto para alumnos como para el seno de la sociedad: contribuye a la cohesión social, a la igualdad de oportunidades y a la normalización del uso del catalán.

Somescola considera en el manifiesto leído "intolerable" lo que define como la "intrusión de los tribunales para regular el modelo y la política educativa del país". "Son los profesionales de la educación, y no los juristas, quienes deben determinar qué modelo garantiza la competencia lingüística de los alumnos en cada caso". "Que un juez determine de forma arbitraria el porcentaje de horas necesarias para aprender una lengua es un escarnio a los profesionales de la educación", asegura el manifiesto.

También advierte que "sentencias como la del TSJC abonan argumentos falsos y peligrosos de instrumentalización política de la educación y de la lengua". Y ante esto, han asegurado las tres representantes de Somescola, "nos reafirmamos en que la escuela catalana ha sido y debe seguir siendo un actor primordial que favorezca la inclusión y la cohesión social en nuestro país, desde una perspectiva intercultural. De este modo, que siga garantizando la igualdad de oportunidades de crecimiento académico y personal, incluida la competencia comunicativa plena en las lenguas de uso normal en la sociedad".

Somescola denuncia que esta sentencia no representa un caso aislado: "los continuos ataques políticos y judiciales contra la lengua catalana y la educación en catalán responden a una voluntad de minorizar la lengua catalana en todos sus usos sociales, hasta el punto de que los diferentes ámbitos de actuación en catalán, incluido el modelo de escuela catalana, viven bajo una amenaza permanente".

De hecho, recuerdan que la situación del catalán en las aulas vive una situación crítica, según los últimos informes del Departament d'Educació: más de un 28% de alumnos no utiliza nunca o casi nunca el catalán en la escuela, por poner sólo un ejemplo. Por todo ello, la plataforma Somescola ha hecho un llamamiento al conjunto de la sociedad catalana "a movilizarse para defender el modelo educativo catalán, e insta a reforzar el trabajo conjunto para consolidarlo, protegerlo y mejorarlo".

Asimismo, se ha instado a las instituciones catalanas a blindar este consenso de país aprovechando el marco político generado por una amplia mayoría del Parlament con el Pacte Nacional per la Llengua. Y también se ha instado al Gobierno español a respetar estos grandes acuerdos avalados también legislativamente por una amplia mayoría parlamentaria. 

Plan para la inmersión en catalán

Por otra parte, el Departamento de Enseñanza ha puesto en marcha un plan de acción para reforzar la inmersión lingüística en catalán en las escuelas y evitar que la aplicación de la sentencia del 25% de castellano rompa el modelo de escuela catalana. El plan se acordó en la cumbre celebrada el jueves en el Palau de la Generalitat entre el Govern de la Generalitat y la mayoría de entidades, organizaciones y sindicatos relacionados con el mundo educativo y de la lengua.