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Tensión en Vitoria por la inauguración a cargo del rey de un memorial que excluye a las víctimas de la matanza del 76

Felipe VI acude este martes junto al presidente Pedro Sánchez a la capital vasca para participar en la presentación del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo. Distintos colectivos critican que no se recojan los casos de quienes murieron a manos de las fuerzas policiales en Euskadi, entre las que se encuentran las víctimas del 3 de Marzo.

Felipe VI
El rey Felipe VI en una imagen de archivo. EFE

El Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo, situado en Vitoria, no tendrá hueco para quienes fueron asesinados en esa misma ciudad en el marco de una de las actuaciones policiales más salvajes de la transición. Las cinco víctimas mortales del 3 de Marzo, acribilladas por la Policía durante una protesta obrera en 1976, no están recogidas en el listado de vulneraciones a los  derechos humanos del memorial que este martes inaugurará Felipe VI, su presidente de honor. 

De nada han valido las reivindicaciones efectuadas por los familiares y amigos de las víctimas del 3 de Marzo. Tampoco se escucharon los reclamos formulados en reiteradas ocasiones por el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran (PNV), quien hace tres meses volvió a afirmar categóricamente que "las víctimas del 3 de Marzo tienen que tener un hueco en el Centro Memorial". 

Sin embargo, el Gobierno central sostiene que este espacio –ubicado en la antigua sede del Banco de España–, está dirigido a recoger los casos de quienes cuentan con el reconocimiento legal de víctimas del terrorismo, entre las que se encuentran las causadas por ETA, Grapo, GAL, Batallón Vasco-Español o Estado Islámico. Sin embargo, las personas que sufrieron graves vulneraciones de derechos humanos en actuaciones policiales no cuentan con tal reconocimiento, por lo que no han sido incluidas.

La plataforma Memoria Osoa (Memoria Completa), formado por distintas organizaciones memorialistas y de víctimas de la dictadura franquista, considera que ese centro "supone un ataque a la convivencia, porque su visión excluyente deja fuera a miles de víctimas de la violencia ejercida por los aparatos del Estado", por lo que este martes a las 12.00, coincidiendo con el acto de inauguración en el que estarán Felipe VI, Pedro Sánchez y el lehendakari Iñigo Urkullu, realizarán una concentración  en la Plaza de los Fueros.

"Este memorial es muy de parte. ¿No es terrorismo lo que hizo el Estado el 3 de marzo de 1976 en Vitoria? ¿Tampoco lo son las muertes de la transición? ¿Y las personas asesinadas en controles policiales en Euskadi?", se pregunta Andoni Txasko, portavoz de Martxoak 3, la asociación que agrupa a las víctimas de los hechos producidos en la Iglesia de San Francisco de Asís de la ciudad alavesa. Aquel día, la Policía disparó contra la multitud que participaba en una asamblea, matando a cinco trabajadores e hiriendo gravemente a otros 60. Los responsables de esos hechos nunca fueron condenados.

"Si nos admitiesen estarían reconociendo que somos víctimas del terrorismo,  y eso es algo que el Estado no piensa aceptar de ninguna manera", dice Txasko, quien destaca además que se trata de una reivindicación de carácter colectivo:  "No queremos estar solamente como 3 de Marzo; lo que pedimos es que se incluyan a las víctimas de todas las vulneraciones cometidas durante la dictadura y la transición", remarcó. 

En el manifiesto dado a conocer en vísperas de la inauguración, la plataforma Memoria Osoa subraya que "el espacio temporal que dicho centro toma como referencia para organizar los contenidos a los que da cabida comienza en 1960, una fecha absolutamente aleatoria en mitad de la dictadura franquista que no se corresponde con la realidad del mapa del sufrimiento provocado antes y después por el Terrorismo de Estado en sus múltiples expresiones: fusilamientos, ejecuciones extrajudiciales, tortura...".

"Planteamiento discriminatorio"

El memorial que este martes inaugurarán Felipe VI y Pedro Sánchez se gestó en a principios de 2012, bajo el Gobierno de Mariano Rajoy. El entonces ministro del Interior, Guillermo Fernández Díaz, suscribió un acuerdo con el consejero del Gobierno Vasco a cargo del PSE, Rodolfo Ares, para sentar las bases de ese espacio, dirigido a constituirse como un lugar donde "preservar y difundir los valores democráticos y éticos que encarnan las víctimas del terrorismo", "construir la memoria colectiva de las víctimas" y "concienciar al conjunto de la población para la defensa de la libertad y de los derechos humanos y contra el terrorismo".

Sin embargo, los colectivos memorialistas consideran que "aborda nuestra memoria colectiva de forma fragmentada, basándose en la exclusión de una gran parte de esa realidad de violencia". "Por tanto, rechazamos el planteamiento discriminatorio del Centro Memorial, que sin duda se contrapone al espíritu y vocación que la sociedad vasca desde su pluralidad ha
manifestado en torno al proceso de construcción de la convivencia. Una convivencia que ha de pivotar sobre el respeto al sufrimiento padecido por todas y todos, al compromiso con los derechos humanos de todas las personas sin exclusiones y a la memoria de todo lo ocurrido como garante de la no repetición", remarcó Memoria Osoa.  

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