Los directivos de Telemadrid han pedido a sus periodistas que eviten utilizar los terminos  "ultraderecha" o "extrema derecha" para referirse a Vox, el partido liderado por Santiago Abascal, que ha irrumpido por primera vez en un parlamento tras obtener doce escaños en las elecciones andaluzas. Según han confirmado fuentes de la cadena a Público, se trata de una medida que ya se aplicó con el cambio de directiva en abril del año pasado y por la que no utilizan adjetivos calificativos para ninguna de las formaciones políticas.

"Seguimos una línea editorial igual para todos los partidos, si a unos no les calificamos de extrema izquierda a otros tampoco de extrema derecha, para eso ya están los tertulianos que participan en las mesas de debate", han confirmado fuentes de Telemadrid.

Los primeros en recibir esta petición han sido los periodistas del programa Buenos días, Madrid este lunes a primera hora, según ha adelantado Voz Populi. Después se ha informado al resto de la redacción de la aplicación de esta medida que, según dichas fuentes, ya recogía su línea editorial. Por ello, han remarcado que no se trata de una decisión de carácter político, sino que achacan esta decisión al hecho de respetar las normas de estilo para que se mantenga una posición neutral en una televisión pública. Una posición que contrasta con el enfoque de la prensa internacional, que no tienen ningún reparo en hablar de extrema derecha y de compararlo con movimientos ultras como los de Marine Le Pen. 

The New York Times apuntaba al comienzo de su artículo que es "la primera vez desde que el país volvió a la democracia" que "los partidos de ultra derecha ganan suficientes votos para expulsar a los socialistas del poder" en Andalucía. Incluso BBC News explica "¿Quién es Vox?" y especifica los detalles del partido ultraderechista. 

¿Por qué Vox es ultraderecha?

Pese a sus medidas claramente xenófobas, su negacionismo de la dictadura de Franco y su discurso contra la mujer, entre otras polémicas medidas, el propio Santiago Abascal rechaza el término "ultraderecha " para su formación. Lo hizo en una entrevista en el diario Las Provincias en octubre cuando afirmó que "Vox no es un partido de extrema derecha, es de extrema necesidad y no nos importa cómo nos califique la extrema izquierda". 

Hasta al propio Albert Rivera, líder de Ciudadanos y posible socio político tras las elecciones andaluzas, le cuesta utilizar este calificativo. En una entrevista en Cadena Ser, se cerró en banda hasta en tres ocasiones para no decir que Vox era un partido de extrema derecha. "Yo no soy analista político", respondía Rivera a la periodista Pepa Bueno. "Eso se lo dejo a ustedes". 

Otro que también se suma a rehuir este término por intereses electorales es el líder del PP, Pablo Casado, quien durante una entrevista en El Objetivo de La Sexta, aseguró que él no define a otros partidos para tratar de zafarse de la pregunta.  "No defino al resto de partidos. Yo con Vox ya he dicho que hay cosas que comparto, por ejemplo la unidad de España, y hay cosas que no comparto, como por ejemplo suprimir las autonomías”. El problema vino cuando, menos de un minuto después, Ana Pastor le pidió una definición de Podemos. La respuesta de Casado, en este caso no se hizo esperar: “Bueno, Podemos es un partido populista”. Para Casado un "mundo ideal" sería en el que "PP, Ciudadanos y Vox estemos unidos".