Este artículo se publicó hace 9 años.
Renfe solo tiene un tren para el AVE a León que acaba de inaugurar Rajoy
La nueva línea de "alta velocidad" a partir de Valladolid no puede superar los 200 kilómetros por hora al no disponer hasta dentro de ocho meses del sistema de seguridad homologado para llegar a los 300 kilómetros por hora.
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MADRID.- La línea de alta velocidad (LAV) ferroviaria ha llegado este martes desde Madrid hasta León, pasando por Palencia, pero lo ha hecho sin excesivo brillo pese a ser un día histórico para ambas ciudades, tradicionalmente mal comunicadas con Madrid y el noroeste de la península. Se trata de la mayor penetración de esta infraestructura hacia el norte que quedará completada antes del acabar esta década.
Y eso que al acto ha asistido el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien trasladó este ceremonial previsto para el pasado jueves "para no interferir en la campaña electoral catalana (sic)", según fuentes oficiales, acompañado de la ministra de Fomento, Ana Pastor, y de las direcciones de Adif y Renfe. En esta ocasión no ha asistido ningún miembro de la familia real.
La puesta en funcionamiento de esta línea se hace de forma precaria. Renfe dispone tan solo de un tren AVE para prestar los cuatro viajes al día entre Madrid y León -dos servicios en cada sentido-, según dijeron a Público fuentes de la empresa ferroviaria. "De momento, en Renfe tan solo disponemos de este tren -en referencia al que ha realizado el viaje inaugural- para prestar el nuevo servicio hasta León. Si pincha por alguna razón, lo tenemos crudo", explicó de forma gráfica un directivo de la empresa pública.
Se trata de un tren AVE de la serie S-112, fabricado por el consorcio hispanocanadiense Talgo-Bombardier, conocido familiarmente como "pato". En concreto, el tren asignado es el número 19, el que ha realizado este martes el trayecto inaugural de ida y vuelta, uno de los 30 trenes que Renfe encargó para puesta en marcha de la línea de alta velocidad entre Madrid y Valencia, el 19 de diciembre de 2010.
Este tren realizará cuatro circulaciones diarias entre Madrid y León a una velocidad mixta. Entre Madrid y Valladolid, en servicio desde diciembre de 2007, circulará, como lo ha hecho en su primer viaje, a una velocidad máxima de 300 kilómetros por hora. A partir de la ciudad castellana el mismo tren tiene limitada su velocidad un tercio, un máximo de 200 kilómetros por hora.
La razón no es otra que el sistema de seguridad empleado. La alta velocidad tiene asignado un sistema sofisticado, el ERTMS (siglas en inglés de Sistema de Gestión de Tráfico Ferroviario Europeo) que requiere "unos meses de ensayo desde la puesta en marcha de la línea. Hasta dentro de unos ocho meses no estará operativo; de momento se utiliza el sistema ASFA que limita la velocidad hasta los 200 kilómetros por hora", dijo un responsable de ADIF a Público.
Esta circunstancia es la misma que se produjo en 2012 con la puesta en marcha de la línea de alta velocidad entre Madrid y Alicante, en el tramo entre Albacete y la ciudad mediterránea. En aquella ocasión la nueva línea se estrenó con trenes Alsthom que entraron en servicio en 1992 con el primer AVE entre Madrid y Sevilla.
Así pues, según las fuentes mencionadas, la duración del viaje actual de 2 horas y 10 minutos entre Madrid y León se reducirá por debajo de las dos horas cuando los trenes AVE circulen por la nueva línea a 300 kilómetros por hora. El tramo inaugurado este martes tiene 166 kilómetros y ha supuesto una inversión de 1.620 millones de euros, de los cuales 1.200 corresponden al Gobierno de Rajoy, según se ha encargado de poner de manifiesto el alcalde leones, el popular Antonio Silvan.
Tanto el alcalde, como el presidente catellanoleonés José Vicente Herrera y el propio presidente Rajoy, han recordado a los ex presidentes Aznar y Rodríguez Zapatero a la hora de glosar los méritos para construir la nueva infraestructura. Los tres han hablado de forma escueta en un acto institucional muy breve en una carpa provisional levanta al efecto y sin copa de vino ni canapés.
La expectación popular al paso del tren AVE inaugural ha sido más bien escasa. Es más, en Valladolid ha habido dos centenares de personas que han protestado por el cierre de un paso a nivel que aísla un barrio del resto de la ciudad. Hace casi ocho años, cuando el AVE llegó a la ciudad ya hubo protestas por este mismo motivo. En León, otras 200 personas, mineros y guardas forestales, han protestado a gritos por la falta de ayudas públicas a estos colectivos.
Esas han sido las manifestaciones más palpables del viaje inaugural porque tanto en Palencia como en León los ciudadanos que se han acercado a ver el acontecimiento han estado relegados fuera de las estaciones y alejados de donde se celebraban los actos formales -en Palencia el descubrimiento de una placa situada en un lugar provisional-.
En este sentido, cabe destacar que la placa que ha descubierto Rajoy estaba fechada por error en León en lugar de en la capital de Palencia. ADIF ha confirmado del error a través de su cuenta en la red social Twitter y ha informado de que "en breve será repuesta con el nombre correcto".
De momento ya ha sido descolgada y ha desaparecido del vestíbulo de la estación palentina en cuanto el presidente del Gobierno y su comitiva se han vuelto a montar en el tren.
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