MADRID. - Tan navideño como el discurso del rey son las reacciones de los partidos políticos al mensaje del monarca, que este año el "me llena de orgullo y satisfacción" de Juan Carlos ha dado paso a la primera alocución de Felipe.

Una de las primeras formaciones en responder al rey ha sido Podemos. Ya anoche, Pablo Iglesias comentaba en Twitter que "compartía aspectos del diagnóstico del jefe del estado" al tiempo que advertía a Felipe VI que "se equivoca si piensa que los responsables de la crisis nos sacarán de ella".

Por la mañana, Irene Montero, responsable de Movimientos Sociales, ha lanzado el mismo mensaje que el líder de su formación. Además de alabar el "buen análisis" sobre los problemas de España, ha criticado al monarca por la ilusión de la que hizo gala durante el discurso ya que, a su juicio, "con ilusión no se acaba con el paro ni con la corrupción".

Pablo Iglesias: "El rey se equivoca se piensa que los responsables de la crisis nos sacarán de ella"

Montero ha defendido que el rey "reconoció que el cambio es inevitable", pero eso, ha dicho, "no pasa por confiar en lo viejo". "Se ha atrincherado en los planteamientos de los mismos que nos han traído a esta situación, al defender que son ellos los que deben conducir la regeneración del país", ha asegurado.

Por su parte, el PSOE ha destacado que el rey fue "tajante y determinante" con su mensaje contra la corrupción y con la "importancia" que manifestó en garantizar el estado de bienestar como elemento de cohesión social. El portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Antonio Hernando, ha valorado en rueda de prensa "la correcta descripción que hizo el monarca de los problemas que afectan a España que son, ha citado, la político-institucional, la económico-social y la territorial.

El PP, por boca de su vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, ha asegurado que Felipe ha demostrado que es un "rey pegado a la calle" y que conoce "perfectamente" los problemas que tienen los españoles. El dirigente conservador ha defendido que el discurso navideño del monarca siguió los tres ejes que, a su juicio, son los "grandes problemas" de España: la corrupción, el paro y los valores constitucionales.

Cayo Lara: ""En los mensajes políticos es tan importante lo que se dice como lo que se calla"

Izquierda Unida, en cambio, ha calificado el discurso de "decepcionante, continuista y contradictorio". El coordinador federal, Cayo Lara, ha considerado que "no es de recibo" que el monarca hablara de corrupción, de paro o de la "delicada situación política" en Catalunya, "mientras obvia conscientemente hacerlo de la independencia judicial, asume la propaganda triunfalista del Gobierno del PP sobre la situación económica y hace continuas alusiones a una Constitución que está agotada y que incumplen de manera flagrante los poderes políticos y económicos del Estado español".

Así, el máximo responsable de IU afirmó que lo que hizo ayer el Rey "es seguir la larga tradición familiar de ocultar que esta crisis política y económica tiene responsables, y que estos son los mismos que han creado y agravado la desigualdad, la pobreza y el verse abocados a la emigración para un número muy significativo de ciudadanos y ciudadanas españoles".

"En los mensajes políticos es tan importante lo que se dice como lo que se calla, y en éste nadie ha podido escuchar ninguna alusión del jefe del Estado a esas personas muy próximas a él y tan salpicadas directamente por la corrupción que a no mucho tardar se van a sentar en el banquillo de los acusados", añadió Lara en alusión a la infanta Cristina.

CiU defiende que el monarca admitió implícitamente la existencia de un desencuentro entre el Gobierno central y el de Catalunya

En la misma línea, el secretario general del PCE, José L. Centella, ha tachado al discurso de "vacío" de contenido, "contradictorio" en las formas y enmarcado en las tesis del Partido Popular. "Aporta pocas novedades, enmarcado en la tesis del PP de defender la vigencia de la Constitución de 1978 y no reconocer que se encuentra superada por la historia y no es, en estos momentos, un marco institucional que ayude en la resolución de los problemas que tiene planteada la mayoría social, que sufre el paro, los desahucios, la pobreza energética o la exclusión social", ha comentado.

El líder de UDC y portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, ha defendido que el monarca admitió implícitamente la existencia de un desencuentro entre el Gobierno central y el catalán y que apeló a Mariano Rajoy a abandonar el "inmovilismo" y a dialogar para buscar una solución política a la situación en Catalunya.

En este sentido, el president de la Generalitat, Artur Mas, ha avisado de que sólo habrá respeto a Catalunya cuando el Estado "entienda y respete que los catalanes tienen derecho a decidir". Mas también ha celebrado que en su discurso el monarca admitiese abiertamente que existe un problema.

Por su parte, la líder de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Rosa Díez, ha asegurado que el rey se ha mostrado "mucho más realista" que el Gobierno, al referirse a la economía en su discurso de Navidad, y ha asegurado que es el monarca de un "tiempo nuevo".

En tanto, El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha afirmado que el mensaje del monarca ha sido "viejo y que, una vez más, se vuelve a olvidar de Euskadi y no se da cuenta de la existencia de realidades nacionales distintas en el Estado".