El Parlamento Europeo ha sancionado este martes a la eurodiputada de la comisión de Desarrollo del PSOE, Mónica González, por presunto "acoso psicológico" a tres asistentes. González tendría que enfrentarse a la pérdida de unos 10.140 euros en dietas y la suspensión durante 30 días de sus actividades. Sin embargo, la eurodiputada ha afirmado que la investigación deriva de "una denuncia falsa y se ha desarrollado sin las mínimas garantías procesales", y anuncia que recurrirá la sanción. También valorará acudir al Tribunal General de la UE "para que juzgue la legalidad del proceso".

La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, ha explicado que González ha quebrantado la norma de conducta parlamentaria que insta a "abstenerse de cualquier tipo de acoso psicológico o sexual". En un comunicado compartido en sus redes sociales, la eurodiputada ha criticado haber sido "injustamente sancionada administrativamente". El dossier ha estado dirigido por una asistente parlamentaria de la ultraderecha europea, y los testimonios clave de personas que continúan trabajando conmigo no han sido escuchados ni tenidos en cuenta".

"Tal como ocurrió en otras falsas denuncias, este organismo devolvió la honorabilidad arrebatada por una falsa denuncia, tan fácil de manchar y tan difícil de limpiar", ha añadido. Y ha asegurado que seguirá "trabajando" como hasta ahora, "tanto a nivel local y regional como europeo, aportando trabajo y compromiso". Actualmente, ninguno de los tres asistentes presuntamente acosados trabaja para la eurodiputada.

La líder del grupo de Socialistas y Demócratas en la Eurocámara, Iratxe García, ha manifestado que el grupo guarda un "respeto absoluto" por la sanción fijada por Metsola y ha expresado que se aplicará "la misma sanción" dentro del propio grupo.