La Fiscalía mantendrá la acusación por rebelión contra los líderes independentistas del procés Oriol Junqueras, Jordi Sánchez, Jordi Cuixart, Carme Forcadell, Joaquim Forn, Jordi Turull, Dolors Bassa, Raül Romeva y Josep Rull que están siendo juzgados en el Tribunal Supremo al considerar que ha quedado acreditada la existencia de una violencia permitida y dirigida por ellos.

En la fase final del juicio al procés, la Fiscalía considera que los delitos de rebelión, malversación y desobediencia han quedado probados, mediante la fase documental y los informes aportados, según informa este martes la Cadena Ser.

Los fiscales del caso se reunirán para ultimar los detalles de su informe final, en el que se establecerán las posibles modificaciones sobre las penas de prisión o inhabilitación, pero sin cambiar la acusación de rebelión.

El Ministerio Público considera que se ha demostrado que los líderes independentistas permitieron una violencia que usaron para presionar y conseguir la independencia en Catalunya, y confirman la intención de mantener la acusación contra los encausados manteniendo la petición más alta de cárcel por los delitos de rebelión y malversación de fondos públicos. 

Fuentes jurídicas han informado a Efe de que el Ministerio Fiscal mantiene esta decisión invocando la decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que este martes ha rechazado la demanda presentada por Carles Puigdemont, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y otros 74 diputados contra la anulación del pleno de octubre de 2017 en el que se iba a declarar la independencia de Catalunya.

Por sendos delitos la petición más alta fue para el presidente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Oriol Junqueras, con 25 años de cárcel. Por un delito de rebelión piden 17 años de prisión para Jordi Sánchez, Jordi Cuixart y Carme Forcadell; seguidos de Dolors Bassa, Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Turull y Josep Rull, con una petición de 16 años de cárcel; y, finalmente, piden siete años por desobediencia y malversación para Santi Vila, Meritxell Borràs y Carles Mundó.