IU rechaza el fichero de viajeros de avión que el Gobierno incluirá en la 'ley mordaza'

MADRID.- Después de asistir este domingo a la histórica manifestación que se celebró en París en rechazo a los atentados yihadistas de la pasada semana, que se cobraron vida de 20 personas incluyendo a los tres terroristas, el coordinador federal de Izquierda Unida, Cayo Lara, ha pedido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (que también asistió a la movilización junto a otros jefes de Estado y autoridades políticas internacionales) que sea “plenamente coherente con su defensa de la libertad de expresión” derogando la Ley de Seguridad Ciudadana que está pendiente de su aprobación en el Senado.

A su juicio, la conocida como ley mordaza “no tiene nada que ver con la defensa de la libertad de expresión que queremos defender en todos los puntos del planeta”, ha asegurado Lara en rueda de prensa en la sede federal de su formación, donde también ha recordado que “el caldo de cultivo del racismo y la xenofobia” que actualmente es Europa “se combate de una manera clara: con pan y cultura y resolviendo los problemas de desigualdad que generan las políticas neoliberales”.

“Los atentados no pueden suponer en ninguna parte del mundo la excusa para restringir las libertades y garantías democráticas”

El líder de IU ha subrayado que “los atentados no pueden suponer en ninguna parte del mundo la excusa para restringir las libertades y garantías democráticas”, algo que en su opinión va a implementar el Gobierno después de acordar internacionalmente reforzar el control de viajeros de avión para prevenir y detectar posibles acciones terroristas.

El ministerio del Interior pretende aparar legalmente este fichero de pasajeros de línea aéreas a través del proyecto de Ley de Seguridad Ciudadana, algo que el coordinador federal de IU rechaza por completo. “Legislar en caliente no es bueno. No se puede aprovechar esta circunstancia [el shock que han supuesto los atentados de París] para recortar libertades”, ha afirmado antes de argumentar que “hay garantías suficientes para controlar a los sospechosos de intentar cometer delitos, pero no por esta vía que ha tomado el ministro”, en referencia a Jorge Fernández Díaz.

En su opinión, ni el Gobierno español ni ningún ejecutivo europeo deberían “sobreactuar” con medidas como la señalada “por el miedo a la fuga de votos a partidos de extrema derecha”, y ha apostado por garantizar lo que “el pueblo francés reclamaba en la manifestación de ayer, la convivencia de todas las razas, culturas y religiones en paz y con libertad de expresión”. “Ni en Europa ni en Oriente Medio se necesitan ni yihad ni cruzadas, desde ningún punto de vista ni perspectiva religiosa”, ha afirmado Lara para pedir “pleno respeto a los gobiernos laicos”.

“Secretismo” del Gobierno para tapar la corrupción

El líder de IU también ha querido referirse al trabajo parlamentario de esta semana, que tratará, entro otros asuntos, los relacionados con las medidas anticorrupción que se debatieron en el pleno del pasado diciembre.

"El PP quiere llegar a las elecciones de mayo y de noviembre con el disfraz de 'Mister Limpio', con pocas personas de su partido en el banquillo de los acusados”

Lara a tildado de “secretismo” la estrategia del Ejecutivo para tramitar las leyes de control de altos cargos y de partidos políticos, que no serán debatidas en pleno en la Cámara Baja, sino que se tratarán únicamente en las comisiones parlamentarias, las cuales las enviarán directamente al Senado. “Quieren realizar un lavado de imagen haciendo pensar que han hecho limpieza, pero nada más lejos de la realidad. No quieren plena transparencia, por eso niegan el debate”, ha sostenido. Según Lara, el Gobierno “no quiere cambiar los sustancial ni modificar la ley de incompatibilidades para evitar que haya puertas giratorias” entre los cargos políticos y los puestos en los consejos de administración de las grandes empresas.

Al mismo tiempo ha advertido de que el PP “quiere llegar a las elecciones de mayo y de noviembre con el disfraz de Mister Limpio, con pocas personas de su partido en el banquillo de los acusados”, cuando lo cierto es que “de los 2.000 imputados por corrupción en España, la mayoría son del PP”, ha afeado junto con el rechazo del Ejecutivo a celebrar comisiones de investigación en el Congreso sobre el agujero económico de las cajas de ahorro o sobre la corrupción, y también por la decisión de los jueces de sacar la plaza de magistrado que actualmente ocupa el juez Ruz en la Audiencia Nacional, que investiga la supuesta financiación ilegal del PP, los sobresueldos y la contabilidad oculta del partido.

La sustitución e Ruz en mayo, en plena instrucción de la causa, es para Lara una estrategia elaborada por el Gobierno para que “se paralicen las causas judiciales abiertas” contra dirigentes y exdirigentes del partido y llegar así “impíos” a las citas electorales de 2015.