Este artículo se publicó hace 8 años.
Felipe VI obliga a sus padres a viajar juntos al 70 cumpleaños del rey sueco
Asisten en representación de la Casa Real española a la clausura de la semana de celebraciones por el aniversario del rey Carlos XVI Gustavo de Suecia. Es su primer viaje juntos en dos años.
MADRID.- Los reyes Juan Carlos y Sofía asisten este sábado en Estocolmo como invitados a la jornada de clausura de la semana de celebraciones por el aniversario del rey Carlos XVI Gustavo de Suecia, en el día que cumple 70 años. Es la primera vez que los monarcas eméritos viajan juntos desde hace dos años, cuando acudieron a Roma para la canonización de los papas Juan XXIII y Juan Pablo II en abril de 2014, aunque se les pudo ver juntos en noviembre de 2015, cuando presidieron, en compañía de los reyes actuales Felipe y Letizia, la entrega de los Premios Nacionales del Deporte en el Palacio de El Pardo.
Según han informado fuentes de la Casa del Rey, Juan Carlos y Sofía han asistido hoy, en primer lugar, a la ceremonia religiosa con Te Deum de agradecimiento a Dios que se celebrará en la capilla del Palacio Real de la capital sueca.
A continuación, en la agenda figura un programa musical organizado por las Fuerzas Armadas cerrado con la interpretación de un coro y una visita al Ayuntamiento de Estocolmo para almorzar en el célebre Salón Azul, lugar que acoge todos los años la cena de gala con que se clausura la ceremonia de entrega de los Premios Nobel.
El distanciamiento de Juan Carlos y Sofía empezó a hacerse evidente tras conocerse la relación del rey emérito con la comisionista Corinna zu Sayn-Wittgenstein por culpa de una caída durante la cacería en la que participó en Botswana, un viaje que la Casa del Rey ocultó a la opinión pública, que le obligó a pedir perdón ante las cámaras por primera vez en la historia de su reinado y que supuso el principio del fin de éste por el escándalo que trajo.
Los detalles de la relación del monarca emérito y la comisionista alemana, así como sus visitas frecuentes a la residencia real de El Pardo, provocaron que la reina Sofía desapareciera prácticamente de la vida pública en España y se centrara en su hija Cristina, la infanta imputada en el caso Nóos, y sus nietos, así como en largas estancias en Palma o Londres, donde reside su hermana Irene.
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