Ciudadanos centra sus enmiendas a la 'ley mordaza' en las ocupaciones ilegales

Después de diez meses paralizando mano a mano la derogación de la Ley de seguridad ciudadana en la Mesa del Congreso, Ciudadanos ha dejado solo al PP en ese intento de bloqueo quincenal mediante la prórroga del plazo de enmiendas. El partido naranja ha presentado más de 100 propuestas de corrección a las iniciativas que buscan reformar o eliminar una de las normas más contestadas de la mayoría absoluta del PP. Se centran, según han informado a Público fuentes de Cs, en la ocupación ilegal, los registros corporales y el maltrato animal.

El partido naranja plantea que si el propietario de "una vivienda o edificación que no revista la condición de domicilio" denuncia una ocupación y existen indicios de que "se está empleando con fines delictivos", las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado puedan "entrar, registrar e identificar a los ocupantes". Las mismas fuentes señalan que otro de sus objetivos es "reforzar el deber de diligencia de los grandes patrimonios inmobiliarios (bancos) para evitar que estos edificios deriven en situación de abandono y se lleven a cabo actividades con fines delictivos". 

Ciudadanos también plantea que el abandono o maltrato de animales domésticos o asilvestrados sea considerado infracción grave y reclama la obligación de registrar toda actividad de fabricación, almacenamiento o comercio de productos químicos que puedan ser utilizados para la elaboración o transformación de drogas tóxicas, estupefacientes, o para la elaboración de explosivos.

Además, el partido naranja propone reforzar las garantías de los ciudadanos en casos de registros corporales y prohibir la desnudez en este tipo de prácticas: "L

a situación de urgencia no puede justificar, en ningún caso, el incumplimiento de estas garantías mínimas de la dignidad de todo ciudadano", concluyen las mismas fuentes.

El Congreso de los Diputados aprobó hace casi un año derogar o modificar la ley de seguridad ciudadana. Ciudadanos —que siempre ha manifestado su intención de reformar la ley de seguridad ciudadana, pero no derogarla— apoyó en el Pleno la proposición de ley del PNV (que plantea la reforma de 44 artículos de la actual normativa) y se abstuvo en la del PSOE (que pide derogar la ley mordaza y retornar como punto de partida para el debate a la legislación de 1992, conocida como ley Corcuera o ley de la patada en la puerta.