La Comisión Europea ha aprobado este martes la propuesta de España y Portugal de prorrogar el tope del gas en el mercado ibérico de la energía. La medida seguirá vigente hasta el 31 de diciembre de 2023 y permitirá que el precio del gas en la generación de electricidad esté limitado para rebajar los altos costes derivados de la coyuntura bélica en Ucrania.

El precio máximo del gas en las centrales de ciclo combinado estaba fijado en los 45 euros MWh. Ahora la Comisión modifica el tope hasta los 56,1 euros MWh en el mes de abril y anuncia que el coste se irá actualizando progresivamente al alza hasta terminar el año con un límite de 65 euros MWh. 

La medida vigente ha permitido que los consumidores españoles y portugueses ahorrasen, en conjunto, 5.000 millones de euros entre junio de 2022 y enero de 2023.

La Comisión entiende que la prórroga de la medida, conocida como mecanismo ibérico, es "necesaria" debido a la "limitada capacidad de interconexión de la península ibérica, la elevada exposición de los consumidores a los precios al por mayor de la electricidad, así como la gran influencia del gas en la fijación de precios de la electricidad". 

Desde Bruselas insisten, no en vano, en que esta es una medida temporal que se fundamenta en el contexto de "volatilidad" económica. De hecho, Von der Leyen trabaja en una reforma integral del mercado energético europeo para intentar reducir la dependencia respecto a Rusia.

 "Con esta decisión, queda cerrado el expediente. Para nosotros esto era importante, poder mantener este seguro para el supuesto de que se vuelvan a disparar los precios del gas natural. Es una noticia positiva que cierra el círculo y que nos permite contar con este seguro adicional para la ciudadanía", ha afirmado la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, durante la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de este martes.

La aprobación de la prórroga llega el mismo día en el que la Unión Europea lanza su primera ronda de compras conjuntas de gas, una nuevo sistema con el que se pretende negociar en bloque las importaciones para abaratar los costes y generar almacenamiento.