MADRID.- El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha acordado esta tarde la libertad de Oleguer Pujol, en lugar de la prisión preventiva que pedía la Fiscalía Anticorrupción para el menor de los hijos variones del expresident catalán, por un delito de blanqueo de las millonarias comisiones que percibió tras la compra-venta de 1.152 inmuebles del Banco de Santander.

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, que investiga el origen de la fortuna de los Pujol, ha acordado dejar en libertad del benjamín de la familia aunque ha acordado estas medidas cautelares: Oleguer Pujol deberá comparecer cada quince días en el juzgado y tiene prohibido salir del país, para lo cual le ha retirado el pasaporte.
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La Fiscalía Anticorrupción había solicitado este jueves el ingreso en prisión preventiva del hijo pequeño del expresidente de la Generalitat, tras escuchar su declaración durante más de cuatro horas como investigado ante el juez instructor. Se le imputa presuntamente un delito blanqueo de millonarias comisiones obtenidas en la operación de compra-venta de 1.152 sucursales del Banco Santander en 2007.

La Fiscalía basó su petición de ingreso en prisión para evitar la ocultación, alteración o destrucción de pruebas relevantes. Además, argumentaba sus sospechas de que podría haber continuado con operaciones de blanqueo mientras es investigado.

La Fiscalía no ha pedido la cárcel en más de dos años

En un auto dictado este jueves, el juez De la Mata recuerda que la causa se abrió hace dos años y medio y que, en este tiempo, Anticorrupción no ha solicitado medidas cautelares personales contra Oleguer Pujol, como es su ingreso en prisión.

Así, se han registrado siete domicilios, analizado oficios policiales de la UDEF y se han tramitado comisiones rogatorias internacionales en las que la Fiscalía, en ningún momento, pidió la prisión para el menor de los Pujol "ni se ponderó la existencia de los riesgos que se habían detectado cuando iban a practicarse las entradas y registros o los que ahora se indican".

El juez no aprecia "elementos nuevos que permitan afirmar razonablemente que en este momento concurre un peligro nuevo no valorado, fundado y concreto, de destrucción de fuentes de prueba, o de capacidad de influencia sobre otros investigados o testigos que no haya tenido ocasión de desarrollar durante todo este tiempo, y que exija por esta razón la adopción de una medida excepcional como la solicitada de prisión provisional".

De la Mata considera que la investigación ha avanzado "razonablemente", no han cambiado las circunstancias que concurrían en 2014 y descarta el riesgo de fuga: Oleguer Pujol tiene un arraigo "notorio" en España, donde tiene su familia, las relaciones sociales y profesionales y no consta que haya faltado a llamamientos judiciales ni indicios de que pueda hacerlo en el futuro.

No colaborar es legítimo, aunque incomode

Respecto al riesgo alegado por la Fiscalía de que el menor de la familia Pujol podría continuar blanqueando sus capitales ocultos, De la Mata responde que su actitud y la de su familia ha consistido en no colaborar, ocultando todos los datos relativos a los productos en que invirtieron sus recursos. El juez entiende que esa conducta, por incómoda que resulte, es legítima en el curso de una investigación y no puede justificar por sí la prisión provisional.

"El mero hecho de que desplegaran actividades opacas tampoco puede justificar la prisión provisional que, como se ha indicado, requiera adicionalmente perseguir determinados fines que ya han sido expuestos", señala el juez de la Audiencia Nacional.

Investigar antes de encarcelar

El juez rechaza enviar a la cárcel a Oleguer Pujol porque, además, los fiscales José Grinda y Juan José Rosa sólo han aportado como prueba de supuestas maniobras una transferencia realizada "hace más de un año" a una cuenta bancaria de Miami, en diciembre de 2015. Según la defensa, esos fondos ya habrían sido repatriados.

El juez sostiene que, antes de recurrir a la prisión -la medida cautelar personal más grave-, existen medios de investigación que permitirán evaluar la conducta Oleguer Pujol  y comprobar si maniobra para ocultar fondos irregulares o si, por el contrario, "se limita a acometer actividades lícitas con fondos ya regularizados ante la Hacienda pública, todo ello sin perjuicio de las responsabilidades penales en que haya podido incurrir con anterioridad".

En el auto en el que le citaba a declarar, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 afirmaba que el hijo menor del matrimonio Jordi Pujol y Marta Ferrusola firmó en noviembre de 2007 un contrato de compra de las sucursales del Banco de Santander por un total de 2.012.889.663,99 euros más 317 millones de euros de IVA actuando en representación de la sociedad limitada Samos Servicios y Gestiones.

En la operación también participaron los hijos del financiero Javier de la Rosa, Javier y Gabriela, y José María de Villalonga Bardella y su hijo José María de Villalonga Cabarrocas, que declararon este miércoles como investigados por delitos de blanqueo ante el juez.