El PSOE parece haber decidido centrar sus criticas en Ciudadanos, y este martes, al término de la reunión de la Ejecutiva Federal, lanzó toda una batería de acusaciones contra el partido de Albert Rivera, al que situaron en el espacio ideológico de la ultraderecha.

La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, llego a afirmar que Rivera ha pasado "de querer ser Suárez a José Antonio", aunque luego lamentó sus palabras, y dijo en la misma conferencia de prensa que las retiraba.

Lo que no retiró la dirigente socialista es que el PSOE considera que Ciudadanos "ya está a la derecha del PP", y recordó que los populares abarcan un espectro social que llega hasta la extrema derecha, por lo que ubicó claramente a Rivera un paso más allá.

Al recordarle el pacto que el PSOE firmó con Ciudadanos para la investidura de Pedro Sánchez, la dirigente socialista indicó que el PSOE no tiene que disculparse por haber firmado dicho acuerdo en aquella ocasión, y recordó que todos los estudios que se hicieron de las 200 medidas acordadas entre ambos partidos concluyeron que el 80% de las medidas pactadas eran claramente socialdemócratas.

Por ello, Lastra indicó que quien se ha movido de sitio ha sido Ciudadanos, "que se ha convertido en ariete por la derecha del PP" y ha apostado claramente por medidas conservadoras y claramente recentralizadoras.

En este sentido, se sumó a las palabras de Miquel Iceta relativas a que el PSC no facilitará tampoco un Gobierno de Inés Arrimada en Catalunya en el caso de que fuese posible y que su candidatura fuera la más votada entre los partidos llamados constitucionalistas, aunque también reiteró que no dará su voto a un presidente independentista.

Además, Lastra reiteró los incumplimientos del acuerdo entre PP y Ciudadanos que cifró en un centenar, de las 150 medidas adoptadas entre ambas formaciones para posibilitar la investidura de Mariano Rajoy.

Lastra indicó, además, que estos incumplimientos afectan a importantes colectivos sociales que no se han visto beneficiados por los acuerdos alcanzados, y destacó tres: autónomos, dependientes y pensionistas. Por el contrario, también denunció que se han paralizado medidas que perjudicarían a las grandes fortunas y a los defraudadores si se pusieran en marcha.

Especialmente dura se mostró con la decisión del Gobierno de endeudarse aún más para abonar la paga extra de los pensionistas, y denunció que el Gobierno de Mariano Rajoy "ha vaciado" la hucha de las pensiones que dejó José Luis Rodríguez Zapatero con más de 65.000 millones de euros.

La número dos del PSOE volvió a pedir la reunión urgente del Pacto de Toledo para adoptar medidas inmediatas porque, en su opinión, el sistema público de pensiones está en serio riesgo. De ello, no dudó en culpar al Gobierno del PP y su reforma laboral, "que ha llevado a sueldos bajos y cotizaciones de miseria", dijo.