El rey se aferra al trono a pesar de su deteriorada imagen social y de los continuos escándalos que afectan a su familia en los últimos meses. Ni abdicará, ni tiene previsto alentar más el debate acerca de su sucesión. Así de claro lo ha dicho este sábado el programa Audiencia Abierta, de TVE, ideado por la corporación pública para alabar la imagen de la monarquía, y que cuenta las andanzas semanales del jefe del Estado y de su familia. 

Una voz en off que dice expresar los deseos y exigencias del propio Juan Carlos de Borbón, y que corresponde a Miguel Ángel Sacaluga, director del espacio y miembro del Consejo de Administración de RTVE, asegura que el monarca 'pretende el relanzamiento de la imagen de la corona', una vez que se ha recuperado de su convalencencia hospitalaria tras su operación de cadera, y justo un día después de que el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) desvelara el fuerte desapego de la ciudadanía hacia el rey . 

Para ello TVE explica que el monarca quiere trasladar 'cuatro mensajes con nitidez': 'transparencia en las cuentas, sometimiento a a la ley y al estado de derecho, de estabilidad cerrando definitivamente el debate sobre la abdicación y de continuidad, reforzando el papel y el protagonismo del príncipe de Asturias para que cuando llegue el momento la sucesión sea sólo un trámite'.

El espacio televisivo que se ha emitido este mediodía explica, en un tono de condescendencia con la jefatura del Estado, que 'en un escenario económico adverso el rey ha regresado con la intención de dar un fuerte impulso a la corona, propiciar acuerdos entre las fuerzas políticas y sociales y retomar su intensa agenda diplomática'. El programa no recoge declaraciones literales del rey, sino que se limita en todo momento a contar sus deseos a través de un narrador.

Así, mientras intercala imágenes de uno de los despachos del monarca con el jefe de la Casa del Rey, Rafael Spottorno, la voz en off explica que el jefe del Estado 'explora las posibilidades de grandes acuerdos que ayuden a reducir el desempleo'. Según el periodista, en esa misma estancia del Palacio de la Zarzuela Juan Carlos de Borbón 'diseña estrategias y elabora planes'.

Los servicios informativos de TVE no escatiman en halagos a la actitud del rey. Afirman que las imágenes muestran 'muchas cosas'. Y citan: 'Su rostro, las huellas del quirófano pero también determinación; sus ojos, el peso de la experiencia pero también decisión; sus manos, el paso del tiempo pero también firmeza; su ánimo, las ganas de seguir dando guerra; y en sus planes, dar un fuerte impulso a la corona'.

Además, el reportaje explica que Juan Carlos de Borbón pretende 'intensificar su papel de árbitro y moderador' en el plano institucional, aumentando sus contactos con 'sectores políticos, sociales y ciudadanos'. Desde que volvió del hospital, prosigue el narrador, el rey 'ha despachado semanalmente con el presidente del Gobierno, y mantenido contactos periódicos con el líder de la oposición'.

El jefe del Estado 'quiere propiciar pactos, acuerdos y consensos desde una escrupulosa neutralidad, por encima de intereses particulares, siglas o ideologías'. Y es que siempre según el discurso de alabanza de TVE,  'el monarca tiene oficio, y una especial habilidad para identificar urgencias y trasladarlas a las cuatro esquinas de las estructuras del Estado'.