El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha recibido este miércoles (madrugada del jueves en España) al expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y al exmandatario panameño Martín Torrijos en el Palacio de Miraflores, en Caracas. Zapatero y Torrijos se encuentran en Caracas desde el martes, en un viaje que pretende allanar el camino al diálogo entre el Gobierno de Maduro y la oposición. Según el diario El Nacional, el expresidente español se reunirán también con líderes opositores.

Este mismo miércoles se produjeron en Caracas varias manifestaciones a favor de la convocatoria de un referéndum revocatorio contra Maduro, que se saldaron con siete detenidos. El ministro venezolano del Interior, Justicia y Paz, Gustavo González López, dijo que los detenidos "están vinculados a organizaciones violentas con fines políticos" y "muchos de ellos son reincidentes en la agenda de violencia", en declaraciones recogidas por el portal Globovisión.

Según este portal, en su reunión con Zapatero, Maduro quería exponer lo que considera una "campaña mediática a la que se encuentra sometida Venezuela, por parte de medios de derecha de España". En varios tuits desde la cuenta oficial de Twitter @PresidencialVen se pueden observar fotografías de Maduro tanto con Zapatero como con Torrijos:
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El presidente del Parlamento venezolano, el opositor Henry Ramos Allup, había afirmado con anterioridad en una rueda de prensa de la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que tienen prevista una reunión con los exgobernantes entre hoy y mañana. Asimismo aseguró que hasta el momento no ha enviado "ningún mensaje especial" porque esperan que los expresidentes, en especial Zapatero y Torrijos, a quienes consideró "compañeros ideológicos", se lleven "sus propias impresiones" de la situación del país.

Zapatero, "amiguete de Maduro"

Menos amable se mostró el padre del también opositor Leopoldo López, encarcelado acusado de instigar las manifestaciones violentas que causaron más de 40 muertos en 2014. Leopoldo Ernesto López Gil declaró que si él fuera un miembro de la oposición no se reuniría con Zapatero porque pertenece al "grupito de amiguetes" de Maduro y del "chavismo que queda" en el país.

Para el padre del opositor, la visita del expresidente a Caracas, como con "cualquier persona que esté invitada por Maduro, huele a extraño", dijo en declaraciones a Antena 3, acompañado por el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, que también viajará la próxima semana a Caracas invitado por la Comisión de Exteriores de la Asamblea Nacional de Venezuela para intervenir ante el parlamento venezolano, controlado por la oposición.

La intermediación de Zapatero, coincide con un momento en el que la oposición venezolana está presionando a las autoridades para que cumplan con celeridad los pasos para convocar un referéndum revocatorio que pueda poner fin al mandato de Maduro antes de lo previsto en 2019. Coincide además con la entrada en vigor de un decreto presidencial de "estado de excepción y emergencia económica", firmado por Maduro para hacer frente a supuestos intentos de golpe de Estado, y lo que ha considerado el momento de las "peores" amenazas contra su país en diez años.

Tanto Zapatero como Torrijos forman parte de la Comisión de la Verdad, la Justicia y Reparación de las Víctimas impulsada por Maduro el pasado abril para aclarar la violencia que se produjo en febrero de 2014, que dejó un saldo de 43 muertos y varios opositores detenidos.