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Los saludos fascistas en un acto en Roma desatan una tormenta política en Italia

Un millar de neofascistas del Movimiento Social Italiano, grupo en el que militó Giorgia Meloni de joven, se ha concentrado a las puertas de su antigua sede. La oposición, por su parte, pide la disolución de estos grupos extremistas.

La concentración extremista en Roma, a 8 de enero de 2024.
La concentración extremista en Roma, a 8 de enero de 2024. — Il Fatto Quotidiano

Los saludos fascistas en el aniversario del asesinato de tres jóvenes del posfascista Movimiento Social Italiano (MSI) ocurrido en Roma en 1978 han desatado fuertes críticas de la oposición italiana, que ha pedido la comparecencia parlamentaria del ministro del Interior del Gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni.

La concentración ha tenido lugar frente a la antigua sede del MSI. Tras finalizar la conmemoración oficial de la conocida como masacre de Acca Larentia, un millar de personas hicieron el llamado "saludo romano", en el que extendieron el brazo derecho al frente al unísono con gritos de "presente". 

Francesco Rocca, el presidente de la región del Lacio, cuya capital es Roma, destacó que los saludos no tuvieron lugar durante el acto oficial, cuyo "único propósito era recordar a las tres víctimas de los Años de Plomo", dijo en alusión a las décadas de los 60 a los 80 marcadas por numerosos atentados políticos en el país. 

Los anni di piombo es una expresión utilizada en la historia de Italia (y también utilizada en España con ETA) que hace referencia a un período de agitación social y política en el país. Desde 1969 hasta 1987 murieron 419 personas por atentados terroristas indiscriminados. Ejemplo de ello fueron los atentados de la Plaza Fontana de Milán en 1969 o el ocurrido en el metro de Bolonia en 1980.

"Si hubiera habido saludos romanos, no habría dudado en estigmatizarlos y distanciarme de ellos. Acusarme de haber dado cobertura institucional a reuniones fascistas es difamatorio", añadió sobre el acto oficial, según los medios locales. Sin embargo, este argumento no ha convencido a la oposición, que casi al completo ha criticado con dureza estos gestos.

La oposición carga contra los gestos fascistas

"Roma, 7 de enero de 2024. Y parece 1924. Presentaremos una pregunta al ministro [Matteo] Piantedosi, lo ocurrido no es aceptable. Las organizaciones neofascistas deben ser disueltas, como dice la Constitución", ha declarado este martes la líder de la oposición y del progresista Partido Demócrata (PD), Elly Schlein.

También el senador de la centrista Italia Viva Enrico Borghi aseguró que "esta imagen parece fechada hace exactamente 100 años, en 1924, y en cambio es de anoche", mientras que la secretaria de Más Europa, Barbara Vecchietti, la definió como "una vergüenza inaceptable".

Vecchietti añadió que Meloni, quien "desde hace años pide que se aclare el asesinato" de los tres jóvenes, debería "oponerse" a la "instrumentalización" de la masacre "para la habitual reunión extremista".

Meloni fue militante del MSI

Meloni ha descartado cualquier matiz antidemocrático de su formación, pero mantiene como símbolo de Hermanos de Italia la denominada "llama tricolor", emblema de la organización juvenil del antiguo y posfascista MSI en el que militó de joven.

"Políticamente es algo lejano a mí de una manera muy significativa", dijo Meloni a finales de octubre de 2023, tras una manifestación ante la tumba de Mussolini en la que también se produjeron saludos fascistas.

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