Masacre terrorista en París

PARÍS.- El terror ha regresado a París después de los atentados yihadistas contra el semanario Charlie Hebdo. Seis ataques coordinados han causado al menos 129 muertos y 352 heridos — 99 en estado crítico— en la capital francesa. Alrededor de un centenar de ellos perdieron la vida en la sala de fiestas Bataclan, donde los terroristas habían tomado cientos de rehenes que fueron ejecutando cuando estaban tendidos en el suelo.

Los ataques han sido perpetrados por comandos terroristas claramente organizados, que armados con rifles de asalto kalashnikov, han abierto fuego en diferentes puntos de la capital francesa, todos locales de ocio. Siete de los ocho terroristas abatidos tras los atentados, fallecieron al hacer explotar sus cinturones explosivos.

El Estadio de Francia también ha sido uno de los objetivos. Allí se jugaba el partido de fútbol entre la selección gala y Alemania. Dentro del campo se pudieron escuchar tres explosiones. Dos corresponden a suicidas que hicieron estallar sus cinturones explosivos en los alrededores del estadio y otra, a una bomba colocada cerca, según fuentes policiales. 

Las cifras provisionales hablan de 129 muertos y casi 352 heridos, 99 de ellos en estado crítico. Se teme que la cifra de muertos aumente a lo largo del día.

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El Ayuntamiento de París ha pedido a sus ciudadanos que no salgan de sus casas y el presidente Hollande ha declarado el estado de emergencia en todo el país y el cierre de fronteras para evitar la fuga de los terroristas. También pidió refuerzos militares y 1.500 militares del Ejército ya están en las calles de París. Se han cerrado las estaciones de metro y las autoridades francesas han decidido suspender las competiciones deportivas en toda la región de París.

Varios testigos han publicado en sus redes sociales que uno de los grupos de asaltantes irrumpió en los establecimientos al grito de "Alá es grande" o "esto es por Siria". El primer tiroteo tuvo lugar sobre las 21.30 hora local en las terrazas de los bares Le Carillon y Petite Cambodge en el distrito X de París, junto al canal Saint Martin.

Según la Policía gala, alrededor de cien personas murieron en en la sala de fiestas Bataclan, donde al menos cuatro terroristas tomaron un número indeterminado de rehenes. Allí tenía lugar un concierto de la banda de rock estadounidense Eagles of Death Metal, y los asaltantes irrumpieron a tiros, según testigos presenciales citados por Libération, al grito de "Allahu Akbar" (Alá es el más grande).

Según los testigos, los terroristas dispararon aleatoriamente contra la multitud. La Policía entró en la sala y se escucharon varias explosiones y disparos. Consiguieron rescatar a varios rehenes, pero los medios franceses hablan de una "verdadera carnicería". La policía asegura que al menos tres de los supuestos yihadistas detonaron sus cinturones explosivos cuando las fuerzas especiales irrumpieron. El cuarto habría sido abatido por los agentes. El presidente francés, François Holande, visitó el escenario de este horror después de comparecer en directo ante la nación.

Hollande, que se encontraba en el estadio viendo el encuentro, fue evacuado y, de inmediato, reunió un gabinete de crisis. Apenas unas horas después comparecía en directo para asegurar que saben quienes son los responsables: el Estado Islámico. Ha cancelado su viaje a Turquía, previsto para este sábado, con motivo de la cumbre del G-20.

El partido amistoso continuó hasta el final para evitar avalanchas y fue cerrado el estadio. Varios cadáveres aparecieron en las inmediaciones. Poco a poco ha sido evacuado, pero ante la confusión inicial, la gente se refugió en el césped. La conmoción era total, como muestra el gesto de los asistentes al partido, que al abandonar el estadio cantaban a coro La Marsellesa, el himno nacional. Esta mañana había habido un falso aviso de bomba en el hotel de concentración en París de la selección alemana.

También hubo informes de tiroteos en la rue de Charonne en el distrito 11 y en el centro el centro comercial Les Halles.

Nadie se atribuyó de inmediato la autoría de los ataques, que han llegado pocos días después de los atentados reivindicados por fundamentalistas del Estado Islámico (ISIS o DAESH) en un distrito chiíta del sur de Beirut, en el Líbano, y un avión turista ruso que se estrelló en la península del Sinaí en Egipto, se cree que por una bomba en su bodega.

Este viernes, Estados Unidos y Gran Bretaña informaban de que habían lanzado un ataque en la ciudad siria de Rakka contra el Estado Islámico, concretamente, contra el grupo en el que estaba el terrorista británico conocido como "jihadista John", autor de las ejecuciones de varios secuestrados occidentales. Dijeron que había muerto en el ataque, aunque no está confirmado.

Francia recuerda hoy más que nunca las 20 personas que murieron en varios atentados yihadistass en París y sus alrededores este último año: 12 en el asalto a la redacción del semanario Charlie Hebdo el 7 de enero, una policía municipal un día después, los autores del tiroteo contra la revista el 9 de enero y cuatro rehenes y su secuestrador y el asesino de la policía municipal un día antes, en el asalto al supermercado judío donde se había atrincherado. Occidente, al menos, clama de nuevo "Je suis Paris".

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