El prisionero palestino Jader Adnan abandonó ayer la huelga de hambre que inició hace 66 días, después de que sus abogados alcanzaran un compromiso con el Shin Bet, los servicios secretos para Israel y los territorios ocupados, que le permitirá quedar en libertad el próximo 17 de abril 'si no aparece ninguna prueba nueva'.

El panadero Adnan, de 33 años, es oriundo del norte de Cisjordania y milita en Yihad Islámica, una organización que Israel considera 'terrorista', aunque en el caso de este preso no se le conoce ningún vínculo con el aparato militar del grupo.

Según los médicos que lo han examinado, Adnan corría peligro de muerte aunque durante su prolongada huelga de hambre, la más larga de un preso palestino, ha ingerido líquidos y vitaminas. A pesar de su debilidad, estaba atado a la cama permanentemente por los dos pies y un brazo.

Adnan fue detenido el 17 de diciembre y en enero se le decretó una 'detención administrativa' de cuatro meses, es decir hasta mayo. Sin embargo, en el pacto que se anunció ayer, sus abogados y el Shin Bet acordaron que los cuatro meses se empezaran a contar desde el 17 de diciembre y no desde enero, de manera que el 17 de abril Adnan saldrá a la calle.

Durante las 'detenciones administrativas' los prisioneros pueden permanecer en las cárceles años sin saber de qué se les acusa y por lo tanto sin poder defenderse. En la actualidad hay 310 palestinos en esta situación. Un antiguo responsable del Shin Bet dijo a La Voz de Israel que para decretar este castigo basta con que el prisionero 'se niegue a colaborar' con el Shin Bet.