El ministro británico de Exteriores, William Hague, dijo que Wikileaks colabora de forma indirecta con los talibanes en Afganistán 'porque pone en peligro a nuestras tropas y a la gente que trabaja para nuestras tropas, y es un regalo como propaganda para los insurgentes'.

Si bien Hague dijo que las tropas occidentales tienen como prioridad 'proteger a la población civil', la información facilitada por la filtración de los documentos internos del ejército indica lo contrario.

En Afganistán, tan sólo tres unidades militares británicas concentran dos terceras partes de todos los incidentes en que las tropas han disparado contra civiles, según The Guardian. La información procede en parte de los documentos filtrados por Wikileaks en agosto y ha sido confirmada por el Ministerio de Defensa.

Los Coldstream Guards dispararon a cuatro civiles en Kabul en tan sólo tres semanas. Los Royal Marines mataron o hirieron a civiles en ocho ocasiones en un periodo de seis meses. Otra unidad estuvo implicada en tres incidentes en 2009.

En noviembre de 2007, los soldados abrieron fuego contra un coche que se acercaba a demasiada velocidad. El conductor murió y resultó ser el hijo de un general afgano. En noviembre de 2008, las tropas dispararon contra un coche por creer que se dirigía contra ellos. Un niño murió en el tiroteo.

El último incidente consignado es de marzo de 2009. Un hombre con problemas mentales se acercó lentamente en una moto. Los soldados hicieron disparos de advertencia para que se alejara. Volvió a aparecer unos momentos después y esta vez fue derribado de un tiro. Fue evacuado a un hospital donde le encontraron fármacos antipsicóticos.