El Gobierno de Israel ha acordado la deportación en las próximas 48 horas de los cientos de activistas extranjeros detenidos tras el asalto a la flotilla solidaria que pretendía burlar el bloqueo sobre la Franja de Gaza, según informó un portavoz del primer ministro Benjamin Netanyahu. La medida incluiría a los activistas que las autoridades hebreas habían amenazado con llevar a juicio.

Entre los detenidos extranjeros a los que afecta esta decisión figuran los españoles Manuel Tapial y David Segarra, que esta noche debían decidir si firmaban o no el acta de deportación voluntaria. La activista Laura Arau firmó dicho acta a lo largo del día, por lo que se repatriación se prevé inmediata.

Anteriormente a esta decisión de última hora, el Ejecutivo hebreo había dejado claro que no variará su política en relación a su bloqueo a la franja de Gaza. A Israel no le pesa la unánime condena realizada en todo el mundo a su ataque de ayer a la Flotilla de la Libertad. El Gobierno israelí se enroca y pese a la 'presión internacional' que pide el fin del bloqueo, el Ejecutivo hebreo continuará con el cerco a la franja 'por aire, mar y tierra', en palabras del propio Netanyahu.

El bloqueo a Gaza continuará 'por tierra, mar y aire', según Netanyahu

El primer ministro israelí mantuvo esta tarde una reunión con sus ministros después de cancelar el encuentro que tenía previsto con el presidente de EEUU, Barack Obama. En el encuentro ministerial, Netanyahu defendió el asalto de ayer contra la flotilla humanitaria y recordó la Operación Plomo Fundido, que el año pasado dejó más de 1.000 palestinos muertos, para demostrar que dicha 'experiencia' reveló que las armas que entran en la Franja se terminan utilizando contra civiles israelíes, según informó el diario Haaretz.

'Gaza es un estado terrorista fundado por los iraníes, y por tanto debemos impedir que cualquier arma llegue', dijo el primer ministro, quien se refirió en particular al material que llega a través de los túneles que comunican la Franja con Egipto.

En este sentido, aseguró que la apertura de una ruta naval hacia la Franja supone un 'peligro enorme' para la seguridad israelí y, en consecuencia, las autoridades seguirán inspeccionando los buques que intenten llegar al área costera.

El bloqueo israelí a Gaza, iniciado tras la captura del soldado israelí Guilad Shalit en 2006 y endurecido tras la toma de la franja por Hamás un año después, ha logrado despertar el foco mediático y diplomático hacia Gaza con motivo del asalto israelí al buque turco 'Mavi Marmara' perteneciente a la Flotilla de la Libertad.

Israel seguirá inspeccionando los buques que intenten llegar a la franja

En la operación, que tuvo lugar en aguas internacionales y en la que participaron comandos de elite israelíes, resultaron muertos al menos nueve activistas, al parecer en su mayoría de nacionalidad turca. Según la versión de las autoridades israelíes, los comandos abrieron fuego contra los activistas al considerar que su vida estaba en peligro.

Netanyahu se defiende y reconoce que aunque 'es verdad que hay una presión internacional y críticas por esta política, deben entender que (el bloqueo) es crucial para el mantenimiento de la seguridad israelí' y aseguró que no se trataba de una 'flotilla de paz, sino de una fuerza violenta'.

La ONU ha llamado a la calma tras las últimas informaciones que apuntan a que al menos un barco con ayuda humanitaria podría intentar sortear el bloqueo de Israel para llegar a la costa de Gaza.

La portavoz de Naciones Unidas Marie Okabe transmitió a la prensa que el organismo internacional está al tanto de los acontecimientos. 'A la luz de lo que ocurrió ayer, reiteramos nuestra llamada a todas las partes a actuar con un sentido de precaución y responsabilidad para una resolución satisfactoria', declaró. Asimismo abogó por 'evitar provocaciones en este momento delicado' y pidió cumplir la legislación internacional.

 La ONU estudia quién debe llevar a cabo las pesquisas del ataque israelí

El Consejo de Seguridad emitió la madrugada de este martes un comunicado en el que condena el asalto realizado por Israel. Igualmente, pide una investigación imparcial para esclarecer los hechos.

Desde entonces se ha desatado la polémica sobre quién debe llevar a cabo las pesquisas pertinentes. Okabe no quiso adelantar si el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, estará del lado de Turquía y otros países al pedir una investigación de Naciones Unidas o por el contrario aceptará que Israel se haga cargo de las pesquisas.

'Discutirá el camino futuro de la acción, incluida la investigación, con dirigentes árabes, turcos e israelíes, así como con miembros del Consejo de Seguridad y con otros líderes mundiales', dijo Okabe, quien subrayó que 'el asunto más urgente es la liberación de los detenidos, la vuelta de los difuntos y la atención a los heridos'.