Nadie como Ahmed Rashid (Rawalpindi, Pakistán, 1948), uno de los analistas políticos más prestigiosos del mundo de Asia Central, conoce las entrañas de Pakistán y de Afganistán. A finales de los años sesenta, recién licenciado en Cambridge y marxista convencido, se alistó en un movimiento separatista de Baluchistán, provincia occidental de su país natal, antes de refugiarse en Afganistán. Desde la invasión soviética de 1979 hasta la caída del régimen talibán en 2001, Rashid lleva 30 años informando de una región donde empezó la guerra contra el terrorismo tras el 11-S. Publica ahora Descenso al caos (Península), en el que critica la actitud de EEUU.En Afganistán, asistimos a un incremento de la violencia.
¿Cuál es la situación actual de las fuerzas talibanes?
Los talibanes controlan la tercera parte del país y tienen bases en Pakistán, donde consiguen armas, dinero y comida. Sus prácticas contra la población civil son terribles. Secuestran a gente. Por ejemplo, en Kandahar, exigen que un hombre de cada familia se aliste en sus tropas. La situación es peor que en los años noventa o que en 2001, pues han conseguido infiltrarse en las ciudades.
¿Podrían tomar Kabul?
No. La fuerza de las tropas extranjeras permite que las ciudades sean seguras. Consiguieron hacerse con algunas, pero no las grandes.
¿Quién los respalda?
Además del dinero conseguido con el tráfico de opio, reciben donaciones de príncipes árabes, hombres de negocios, fundaciones privadas.
También se acusa al ISI, los servicios secretos paquistaníes.
Pakistán se ha convertido desde 2001 en un santuario para los talibanes. Ahí reactivaron los contactos que tenían cuando gobernaban: Al Qaeda, las escuelas coránicas. El ISI los protege, les permite actuar.
¿En este país se juega el futuro de la zona?
Lo primero es acabar con este santuario.
Lo que supone más ataques de EEUU y de la OTAN.
¿Habrá más guerra? Claro que sí. No hay que dejar a los talibanes en Afganistán. Por eso hay que mandar más tropas para luego respaldar y dar ayudas a la población civil.
Eso prometía George W. Bush después del 11-S.
Es precisamente lo que hay que hacer ahora: corregir los errores de Bush y la lista es larga. Prometió a los afganos que su vida cambiaría, que se reconstruiría su país. No cumplió nada. En 2001, no había insurgencia. Una de las razones de este fracaso es Irak, que acaparó las ayudas y las Fuerzas Armadas. La Administración de Barack Obama ya ha empezado a trabajar en ello.
¿Reconstruir Afganistán aún es posible o el país está condenado al caos?
Todo es aún salvable. Los afganos no quieren que los talibanes vuelvan. Hay que reconstruir la Administración de un país destruido por 30 años de guerra, hacer leyes, desarrollar la educación. Hay que reestructurar toda la sociedad. Y esto vale también para muchos países de Oriente Próximo, que siguen viviendo en el pasado. Si se adopta la política adecuada en Afganistán, las cosas pueden mejorar mucho en los próximos cinco años y los talibanes podrán ser vencidos.
¿Y Pakistán? Se espera mucho del nuevo presidente Asif Alí Zardari.
La situación es más complicada. El país sufre una crisis política y económica muy grave, un contexto en el que crece el extremismo religioso. No hay solución a corto plazo y el proceso será largo.
En el valle de Swat, se alcanzó un acuerdo para aplicar la ley islámica.
¡Es un desastre! Se puede hacer concesiones a los talibanes, pero no con la Constitución y el Estado de derecho. Ahora la ley y el orden están en manos de los talibanes. Y querrán controlar cada vez más territorio.
Controlan el Baluchistán, donde se supone que se refugió Osama Bin Laden.
El consejo talibán está en Quetta, la capital de la provincia, aunque no sabemos quién participa. Son peces gordos. Pero Bin Laden está más en el norte del país.
¿Cómo ve Al Qaeda tras ocho años de guerra contra el terrorismo?
Es más fuerte que nunca. El único país donde está debilitada es Irak, aunque ahora han aparecido células de la organización donde antes no las había, como en Europa.
¿Te ha resultado interesante esta noticia?
Comentarios
<% if(canWriteComments) { %> <% } %>Comentarios:
<% if(_.allKeys(comments).length > 0) { %> <% _.each(comments, function(comment) { %>-
<% if(comment.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= comment.user.firstLetter %>
<% } %>
<%= comment.user.username %>
<%= comment.published %>
<%= comment.dateTime %>
<%= comment.text %>
Responder
<% if(_.allKeys(comment.children.models).length > 0) { %>
<% }); %>
<% } else { %>
- No hay comentarios para esta noticia.
<% } %>
Mostrar más comentarios<% _.each(comment.children.models, function(children) { %> <% children = children.toJSON() %>-
<% if(children.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= children.user.firstLetter %>
<% } %>
<% if(children.parent.id != comment.id) { %>
en respuesta a <%= children.parent.username %>
<% } %>
<%= children.user.username %>
<%= children.published %>
<%= children.dateTime %>
<%= children.text %>
Responder
<% }); %>
<% } %> <% if(canWriteComments) { %> <% } %>