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La patronal de residencias asegura que en la primera ola "el sistema falló" con los ancianos

  • Agencia Atlas - 03/03/2021 17:50
Ramona Carvajal vive el primer aniversario de la muerte de su madre Alina con mucha tristeza. Ella grabó el pasado marzo todas las llamadas que hizo al geriátrico de Griñón (Madrid) exigiendo que la trasladaran a un hospital. La respuesta siempre era la misma: No. En esos audios se oye a la doctora de la residencia explicándole que el protocolo de la Comunidad de Madrid impedía los traslados de los ancianos con problemas de salud. "O sea, todos", concluye Ramona. Y grabó también al director del geriátrico, a voz en grito:  -¡Los hospitales están saturados. No me dejan derivar a nadie! -¿Qué dejamos, que se mueran en la residencia? -¡Repito, no me dejan derivar! Así estuvo durante tres semanas, mientras su madre cada vez enfermaba más. Hasta que consiguieron que la derivaran. Ese día, el directivo terminó la conversación diciéndole: "Lejos de darme las gracias me estás tocando los cojones... Y eso jode a cualquiera". Textual. Pocos días después, Alina murió. Ha pasado un año y el tribunal que se encarga del caso aún estudia si admite a trámite la querella contra el director. Un aniversario que también recuerda con rabia la patronal de residencias. Cinta Pascual, directora de CEAPS, asegura que al principio las administraciones les aseguraron que "no se preocuparan, que era una gripe". También se refiere a la falta de traslados a los hospitales: "Está clarísimo que falló el sistema. De todas, todas". -Redacción-

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