No hubo grandes anuncios, ni medidas 'estrella'. 'Lo bueno se hace esperar', dijo ayer Juan Costa, coordinador del programa electoral del PP durante su intervención en el Fórum Europa.

Sólo dio pinceladas de lo que será la futura oferta de Rajoy: 'Un programa ambicioso, riguroso y fiable' y no 'un conjunto de promesas electoralistas de dudoso cumplimiento'.

En definitiva, un proyecto que 'devuelva la ilusión y la confianza a los españoles para superar la incertidumbre, inestabilidad y falta de rumbo del Gobierno'.

Tras esta declaración de intenciones, Costa pasó a centrarse en su verdadero objetivo: el presidente del Gobierno. Acusó a Zapatero de convertir 'nuestro modelo de Estado en un desbarajuste', de poner 'en entredicho el concepto de nación y de haber gobernado, complacido y complaciente, con el apoyo parlamentario de grupos políticos que promueven la secesión y que no creen en el proyecto de España'.

Para el ex ministro de Ciencia y Tecnología, con el jefe del Ejecutivo 'hemos retrocedido treinta años' porque ha metido a España en un 'laberinto' del que no 'sabe encontrar la salida'.

Mensajes distintos

En opinión de Costa, la reunión entre Zapatero e Ibarretxe, era una prueba de que el presidente es 'rehén de sus propios errores'. Sus declaraciones venían a sumarse a las del portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Eduardo Zaplana, quien el día anterior había señalado que la 'timorata' reacción de Zapatero demostraba que éste no tenía 'legitimidad' para frenar el desafio.

Sus palabras contrastaron con la declaración posterior de Rajoy. Para el jefe de la oposición, la respuesta al lehendakari había sido la misma que él le habría dado. En el PP, la verdad, se sorprendieron por su intervención.

Pero sus dirigentes comprendieron que su tono moderado respondía a la gravedad de la situación.El debate fue aumentando.Más aún cuando Zaplana aseguraba, tras el desayuno informativo, que criticar la falta de 'contundencia, energía y claridad' de Zapatero no era incompatible con lo que decía su presidente. El líder del PP, lo zanjó a la gallega.

En una conversación informal con periodistas señalaba que Zaplana 'dijo lo que dijo' y que él dijo lo que tenía que decir 'como presidente del PP'.